Nicaragua

Daniel Ortega excarcela a 2.815 presos mientras oculta las cifras reales de contagios

El presidente de Nicaragua se niega a tomar medidas contra el coronavirus mientras los brotes en las cárceles, los entierros exprés y la saturación en los hospitales alarman a la población

Nicaragua excarcela a 2.815 reos por el mes de las madres
Agentes del sistema penitenciario de la cárcel conocida como La Modelo de Tipitapa forman un cordón de seguridad tras el anuncio de excarcelación de presos y la aglomeración de familiares que los esperaban este miércolesJorge TorresAgencia EFE

Un total 2.815 reos, incluyendo ancianos con enfermedades crónicas, han sido excarcelados en la Nicaragua de Daniel Ortega en conmemoración del “mes de las madres” en el país, cuyo Gobierno sigue sin establecer restricciones ante la pandemia de COVID-19.

El Ministerio de Gobernación informó de la excarcelación de 2.727 varones y 88 mujeres que se encontraban recluidos en penales ubicados en Tipitapa, Chinandega, y Granada en el Pacífico, Matagalpa y Estelí en el norte, Juigalpa en la zona central, y Bluefields en el Caribe sur.

Las autoridades señalaron que los convictos continuarán cumpliendo su pena bajo “el beneficio de convivencia familiar”, aunque a nadie se le escapa que el miedo a la propagación del coronavirus está detrás de la medida.

La excarcelación, en la que estuvo presente el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), provocó que cientos de familiares de los presos, incluyendo los considerados “presos políticos”, se aglomeraran en la calle que lleva hacia la cárcel conocida como “La Modelo”, en la ciudad de Tipitapa, con la esperanza de recibir a los excarcelados.

Algunos de los familiares, especialmente las madres, se mostraron ansiosos por saber si sus seres queridos estaban incluidos en la lista de excarcelados, pero en esta ocasión el Ministerio de Gobernación no hizo público el listado, ni sacó a los presos por la puerta principal.

La Asociación de Víctimas de Abril (AVA) no pudo confirmar la excarcelación de ningún "preso político" inmediatamente después del anuncio oficial.

El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) celebró las excarcelaciones, pero criticó el “doble rasero” del Gobierno, al “no reconocer” que su decisión no es por el mes de las madres sino por la COVID-19, así como haber discriminado a los llamados “presos políticos” en la selección de los beneficiados, informa Efe.

El Gobierno de Daniel Ortega, que cada año libera a miles de presos por delitos comunes, nunca había excarcelado a tantos privados de la libertad en mayo. En 2019, fueron 50 los convictos enviados a sus casas.

Focos en las cárceles

La excarcelación fue anunciada de forma sorpresiva, un día después de que un “preso político” con supuestos síntomas de COVID-19, que había sido dado por desaparecido desde el sábado, fuese encontrado intubado en el hospital estatal dedicado a pacientes afectados por la pandemia, a donde lo habían llevado sin avisar a sus familiares.

Diferentes organizaciones opositoras emitieron un S.O.S. por los “presos políticos” en marzo pasado, cuando el Ministerio de Salud confirmó el primer caso de COVID-19 en Nicaragua, y la presión se incrementó la semana pasada, cuando los reos denunciaron la muerte de dos personas con síntomas de la enfermedad, sin que hasta ahora las autoridades hayan confirmado ni negado la información.

Según AVA, que exige la liberación absoluta de los “presos políticos”, unos 193, en Nicaragua los presos están especialmente expuestos a contraer COVID-19 porque sufren hacinamiento, reciben agua de mala calidad racionada y no tienen acceso a la salud. En los útlimos días se suceden las denuncias de casos de contagiados mientras las autoridades guardan silencio.

Secretismo oficial

Actualmente el Gobierno reconoce 25 casos en todo el país, con ocho muertos, cifras que nadie cree. Por ejemplo, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 ha informado de 1.033 contagiados, con 188 fallecidos por causas relacionadas a la pandemia.

Ortega, que llegó a decir que la pandemia era una señal de Dios, se mantiene impasible ante los efectos de la pandemia, mientras los hospitales de todo el país, tanto públicos como privados, están al borde del colapso, según denuncian los sanitarios.

Especialmente preocupante es la situación de los centros de la capital Managua, como el Hospital Alemán Nicaragüense o el Monte España, donde hay al menos 46 ingresados, seis de ellos facultativos, según informa el diario “La Prensa”. Se les trata oficialmente de “neumonía atípica”, ya que el Gobierno oculta los resultados de los test de COVID-19.

El periódico cita testimonios de profesionales y de familiares que se agolpan a las puertas de los centros mientras cada vez con más frecuencia ven salir coches fúnebres en dirección a los hospitales sin nadie que les informe.