FBI

Récord de crímenes de odio en Estados Unidos

El FBI advierte de que 2019 ha sido el año con más delitos motivados por la raza, religión u orientación sexual de la última década

Antonio Basco, perdió a su esposa Margie Reckard durante el tiroteo en el Walmart de El Paso, Texas, en agosto de 2019
Antonio Basco, perdió a su esposa Margie Reckard durante el tiroteo en el Walmart de El Paso, Texas, en agosto de 2019JOSE LUIS GONZALEZREUTERS

Los crímenes de odio en Estados Unidos aumentaron al nivel más alto en más de una década, ya que los funcionarios federales también registraron el mayor número de asesinatos motivados por el odio desde que el FBI comenzó a recopilar esos datos a principios de la década de 1990, según un informe del FBI publicado este lunes.

Según recoge la agencia de Inteligencia, hubo 51 asesinatos por delitos de odio en 2019, que incluyen a 22 personas que murieron en un tiroteo que tuvo como objetivo a mexicanos en un Walmart en la ciudad fronteriza de El Paso, Texas. El sospechoso de ese tiroteo de agosto de 2019, que dejó a otras dos docenas de personas heridas, fue acusado de delitos estatales y federales en lo que las autoridades dijeron fue un intento de asustar a los hispanos para que abandonaran Estados Unidos.

Hubo 7.314 crímenes de odio el año pasado, frente a los 7.120 del año anterior y acercándose a los 7.783 de 2008.

El informe anual del FBI define los crímenes de odio como aquellos motivados por prejuicios basados en la raza, religión u orientación sexual de una persona, entre otras categorías. Algunos de los aumentos de 2019 pueden ser el resultado de informes mejorados de los departamentos de Policía, pero los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y los grupos de defensa no dudan de que los delitos de odio están en aumento.

Antisemitismo

Durante años, el Departamento de Justicia ha priorizado los enjuiciamientos por delitos de odio. Los datos también muestran que hubo un aumento de casi un 7% en los delitos de odio basados en la religión, con 953 informes de delitos contra judíos e instituciones judías el año pasado, frente a los 835 del año anterior.

El FBI dijo que el número de crímenes de odio contra afroamericanos se redujo ligeramente a 1.930, desde 1.943. Sin embargo, los delitos de odio contra los hispanos aumentaron a 527 en 2019, de 485 en 2018. Y el número total de delitos de odio basados en la orientación sexual de una persona se mantuvo relativamente estable, con un delito menos denunciado el año pasado, en comparación con el año anterior. Con todo se informaron de 20 crímenes de odio más contra homosexuales.

Tras hacerse públicos los datos, grupos como la Liga Antidifamación pidieron al Congreso y a las agencias de aplicación de la ley en EE UU que mejoren la recopilación de datos y la denuncia de delitos de odio. Los críticos han advertido durante mucho tiempo que los datos pueden estar incompletos, en parte porque se basan en informes voluntarios de las agencias policiales de todo el país.

El año pasado, solo 2.172 agencias de las 15.000 participantes en todo el país reportaron datos sobre delitos de odio al FBI, reconocieron desde el FBI. Y aunque aumentó la cantidad de agencias que informaron sobre delitos de odio, la cantidad de agencias que participaron en el programa disminuyó con respecto al año anterior.

Un gran número de agencias policiales pareció no presentar ningún dato sobre delitos de odio, lo que ha sido una lucha constante para los funcionarios del Departamento de Justicia.

“La gravedad total del impacto y el daño causado por los delitos de odio no se puede medir por completo sin una participación completa en el proceso de recopilación de datos del FBI”, reconoció el presidente de la Liga Anti-Difamación, Jonathan Greenblatt, en un comunicado.

Una investigación de Associated Press en 2016 encontró que más de 2.700 departamentos de Policía en todo el país no habían presentado un solo informe de delitos de odio para el recuento anual de delitos del FBI durante los seis años anteriores.

Greenblatt también indicó que Estados Unidos debe “eliminar las barreras que con demasiada frecuencia impiden que las personas en comunidades marginadas, las personas con más probabilidades de sufrir crímenes de odio, denuncien incidentes basados en el odio”, un sentimiento compartido por otros activistas.

“El informe del FBI es otro recordatorio de que tenemos mucho trabajo por hacer para abordar el odio en Estados Unidos”', aseveró Margaret Huang, presidenta del Southern Poverty Law Center.