¿Quiénes son los cuatro policías franceses imputados por golpear a un productor musical negro?

Los cuatro policías franceses que detuvieron violentamente a un productor musical negro en París han sido imputados durante la madrugada del lunes, dos de ellos encarcelados y los otros dos puestos bajo control judicial según medios franceses.

Tres de los agentes, entre ellos los dos detenidos, fueron imputados por violencia voluntaria ejercida por un titular de la autoridad pública, declaraciones de carácter racista, falso testimonio, violación de un domicilio y degradación voluntaria de bienes privados.

El cuarto, sospechoso de haber lanzado una granada lacrimógena durante la detención, está acusado de violencia voluntaria y degradación de bienes.

La detención, el pasado 21 de noviembre, ha desatado una crisis política y social en Francia. Todo empezó cuando el productor musical negro Michel Zecler se cruzó con un coche policial de camino a su estudio en París y entró rápido en él para evitar ser multado porque no llevaba mascarilla. Los tres primeros agentes imputados entraron por la fuerza a su estudio, según muestran las cámaras de su local y grabaciones de los vecinos. Lo sacaron a golpes con la intención de multarlo.

Según la Fiscalía, los policías han admitido que los golpes propinados no estaban justificados y que actuaron así por miedo.

Las últimas evaluaciones de los agentes por parte del órgano de control de la Policía Nacional los describen como “buenos” o incluso “excelentes”, sin ningún incidente que manche su currículum.

El agente que lideraba el grupo, en prisión preventiva es un brigadier de 44 años que obtuvo calificaciones excelentes en su última evaluación, en 2019. Es miembro de la policía desde hace 19 años y se caracteriza por tener una “sólida formación profesional”, “buena experiencia en el campo” y “habilidades policiales probadas”.

El otro agente encarcelado es un hombre de 23 años es un hombre “discreto” y “motivado”. Se incorporó a la policía en 2017. En su evaluación de 2020, se destaca que “cumple con seriedad las misiones que se le encomiendan”.

El tercer acusado tiene 31 años y pertenece al cuerpo policial desde 2014. Su evaluación refleja su “fiabilidad”, su “motivación” y sus cualidades de “disponibilidad” y “aptitud para el trabajo en equipo”. Aporta, según su valoración, total satisfacción en las misiones que se le encomiendan y ha adquirido “las aptitudes de un profesional de las fuerzas del orden”.

Los tres han negado haber realizado comentarios racistas, como ha denunciado la víctima.

El cuarto policía imputado acudió cuando se pidieron refuerzos y se sospecha que fue quien lanzó una granada lacrimógena desde una ventana rota hacia el interior del estudio.

La detención de Michel Zecler ha ocurrido precisamente en medio de las protestas por una nueva proposición de ley, aprobada esta semana en primera lectura por la Asamblea Nacional, que quiere limitar la difusión de imágenes de intervenciones de los agentes.