Venezuela

Aznar y Felipe González instan a la comunidad internacional a seguir reconociendo a Guaidó

Los dos ex presidentes se suman a un llamamiento realizado por una veintena de líderes iberoamericanos contra “la farsa” electoral del chavismo

Jarrones chinos
Jarrones chinosCristina BejaranoLa Razón

Más de una veintena de expresidentes iberoamericanos, entre ellos José María Aznar y Felipe González, han secundado un llamamiento en el que instan a la comunidad internacional a seguir reconociendo la legitimidad de la actual Asamblea Nacional venezolana y a su líder, Juan Guaidó, por considerar “fraudulentas” las elecciones convocadas por el chavismo el pasado domingo.

La Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), que agrupa a estos antiguos líderes políticos, ha señalado que “los gobiernos democráticos del mundo”, así como Naciones Unidas y la Unión Europea, deben “mantener su reconocimiento” a la Asamblea y al “encargado de la Presidencia” venezolana, en alusión a Guaidó.

En este sentido, consideran que “la Asamblea Nacional y sus autoridades legítimas habrán de permanecer ejerciendo la representación democrática de los venezolanos hasta tanto se alcancen unas elecciones presidenciales y parlamentarias libres, justas, competitivas, observadas internacionalmente y bajo las seguridades de un Estado democrático y de Derecho”.

Los comicios del domingo fueron en cambio un “farsa”, en opinión de los expresidentes, que han aludido a la elevada abstención como una forma de rechazo contra la “dictadura” de Nicolás Maduro. Asimismo, han criticado que el Gobierno organizase los comicios “con un órgano electoral bajo su control”, aumentando “insconstitucionalmente” los escaños y “confiscando” partidos políticos.

“Luego de violar abiertamente la Constitución y hacerla desaparecer, esgrime ahora sus plazos para poner fin a la Asamblea Nacional que se le opone, que fue resultado de una voluntad popular incuestionable”, han defendido los expresidentes, al aludir a las elecciones parlamentarias de 2015.

IDEA ha lamentado la “persecución” ejercida contra los diputados y la retirada de competencias al órgano legislativo durante estos últimos años, hasta el punto de quedar anulado ‘de facto’ a nivel interno tras ser declarada en desacato por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela.