Alerta en Estados Unidos por la llegada de la tormenta “Henry”, la peor en 30 años

Los preparativos para una tormenta se volvieron más urgentes el sábado, cuando el huracán Henri, recientemente actualizado, se acercó al noreste.

La última trayectoria de la tormenta la pone en camino de chocar el domingo con una larga franja de costa, con alertas de huracán que se extienden desde las cercanías del antiguo puerto ballenero de New Bedford, Massachusetts, a través de las lujosas fincas frente al mar de los Hamptons de Nueva York, hasta la escapada de verano de Fire Island. Se esperaban vientos intensos y marejadas potencialmente peligrosas en el este de Cape Cod y en el oeste de la costa de Nueva Jersey, y las empresas de servicios públicos advirtieron que los cortes de electricidad podrían durar una semana o incluso más.

Henri estaba virando un poco más hacia el oeste de lo que se esperaba originalmente, y si esa trayectoria se mantiene, tendría al este de Long Island en su diana en lugar de Nueva Inglaterra, que no ha recibido un golpe directo de un huracán desde el huracán Bob en 1991, una tormenta de categoría 2 que mató al menos a 17 personas.

Nueva York no ha recibido el impacto directo de un potente ciclón desde que la supertormenta Sandy causó estragos en 2012. Algunas de las reparaciones más importantes de esa tormenta se han completado, pero muchos proyectos diseñados para proteger contra futuras tormentas siguen sin terminar.

La población de Fire Island, una estrecha franja de pueblos arenosos apenas por encima del nivel del mar frente a la costa sur de Long Island, se engrosa durante la temporada de verano. Se instó a los residentes y a los visitantes a evacuar; los últimos barcos saldrán a las 22:40 horas del sábado. Después de eso, dijeron las autoridades, puede que no haya salida para las personas que decidan aguantar la tormenta. “Si no abandonan la isla hoy, se quedarán atrapados en ella y no sabemos a qué tipo de condiciones pueden enfrentarse. Pero podrían ser difíciles. Podrían ser peligrosas”, dijo el ejecutivo del condado de Suffolk, Steve Bellone.

Nueva York y Nueva Inglaterra, los que están más “amenazados”

Con una velocidad máxima de viento de 75 mph (120 kph) el sábado por la mañana, Henri aceleró ligeramente para moverse hacia el norte-noroeste a 14 mph (23 kph). Todavía está a unos 750 kilómetros (465 millas) al sur de Montauk, en Long Island, Nueva York.

Independientemente de su llegada exacta a tierra, se esperaban amplios impactos en una gran franja del noreste, que se extendía hacia el interior hasta Hartford, Connecticut, y Albany, Nueva York, y hacia el este hasta Cape Cod, que está repleto de decenas de miles de turistas de verano. Como consecuencia del cambio de trayectoria de Henri, el sábado se levantó la alerta de huracán para el Cabo, aunque se mantuvo la advertencia de tormenta tropical y de marejada ciclónica.

El Centro Nacional de Huracanes dijo a última hora de la mañana del sábado que el aviso de huracán para la costa sur de Nueva Inglaterra, incluyendo Rhode Island, se ampliaba hacia el este, abarcando la isla de Block. Dijo que una advertencia de tormenta tropical para la costa de Massachusetts se había ampliado hacia el este, incluyendo Nantucket. La marea de tormenta de entre 1 y 1,5 metros es posible desde Flushing, Nueva York, hasta Chatham, Massachusetts, y para partes de la costa norte y sur de Long Island, dijo el centro de huracanes. Se esperan lluvias de entre 7,5 y 15 centímetros (3 a 6 pulgadas) entre el domingo y el lunes.

El servicio meteorológico advirtió de la posibilidad de que se produzcan vientos dañinos e inundaciones costeras generalizadas, y las autoridades de Massachusetts, Connecticut y Nueva York advirtieron de que la gente podría quedarse sin electricidad durante días. Las autoridades aconsejaron a la gente que asegurara sus barcos, repostara sus vehículos y se abasteciera de productos enlatados.

El gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, instó a las personas que estaban de vacaciones en el Cabo a marcharse. Un estado más abajo, el gobernador Ned Lamont advirtió a los residentes de Connecticut que debían prepararse para “refugiarse en su lugar” desde el domingo por la tarde hasta al menos el lunes por la mañana, mientras el estado se prepara para el primer posible impacto directo de un huracán en décadas.

“No hemos pasado por esto desde hace mucho tiempo y no hay duda de que nosotros y el resto de Nueva Inglaterra tendríamos verdaderas dificultades con el impacto directo de un huracán”, dijo Michael Finkelstein, jefe de policía y director de gestión de emergencias en East Lyme, Connecticut.