Coronavirus

El pasaporte Covid ya es obligatorio para usar el transporte público en Italia

Algunos antivacunas y negacionistas han amenazado con bloquear medio centenar de estaciones de tren por la entrada en vigor de esta medida

Italia exige a partir de hoy el certificado sanitario para los viajes en transporte público, una medida polémica que está generando protestas de los antivacunas
Italia exige a partir de hoy el certificado sanitario para los viajes en transporte público, una medida polémica que está generando protestas de los antivacunasToni Conde MolinaEFE

El pase sanitario que certifica haber recibido la pauta completa de la vacuna contra la COVID-19, haberse recuperado de la enfermedad o haber dado negativo en una prueba diagnóstica en las últimas 48 horas, es obligatorio en medios de transporte en Italia desde este miércoles.

Las autoridades han extendido el uso del certificado a trenes, aviones o autobuses, mientras que también será necesario presentarlo para el personal escolar y el acceso a las universidades del país. La certificación se requiere en todas las regiones del país, independientemente de su nivel de riesgo por la COVID-19, informa Adnkronos.

El uso del pase en medios de transporte se ha sumado a una amplia de sectores ya reguladas desde principios de agosto. Así, el certificado es obligatorio para sentarse en una mesa en interiores de locales de restauración, para asistir a espectáculos o eventos deportivos y para acceder a museos y otras instalaciones culturales. También en piscinas, gimnasios, para practicar deportes de equipo, ferias, conferencias, congresos, spas, parques temáticos o campamentos de verano, entre otras.

Es para ciudadanos mayores de 12 años y únicamente están exentos los ciudadanos que no puedan vacunarse por motivos de salud o los que participaron en el ensayo clínico Covitar. Tiene una duración de un año.

Las autoridades italianas han previsto la imposición de multas para los responsables de los servicios en los que se requiere el pase y los ciudadanos que no cumplan con la normativa. En caso de infracción, las multas oscilan entre los 400 y los 1.000 euros, que tendrán que pagar tanto el operador como el usuario. Si se repite tres veces en tres días distintos, el pase podrá inhabilitarse entre uno y diez días.