Ressa

La premio Nobel de la Paz critica a Facebook por propagar el discurso del odio y la desinformación

La periodista filipina, María Ressa, aprovecha su nuevo estatus para alertar sobre el ataque de la red social contra la democracia

La coganadora del Premio Nobel de la Paz, Maria Ressa, durante una entrevista hoy en Manila
La coganadora del Premio Nobel de la Paz, Maria Ressa, durante una entrevista hoy en ManilaAaron FavilaAP

La coganadora del Premio Nobel de la Paz, la filipina Maria Ressa, ha aprovechado su nuevo estatus internacional para criticar a Facebook por ser una amenaza a la democracia. Para Ressa el gigante de las redes sociales no protege contra la propagación del odio y la desinformación y va “contra los hechos”. La veterana periodista y directora del sitio de noticias filipino “Rappler” relata en una entrevista con Reuters que los algoritmos de Facebook “priorizan la difusión de mentiras mezcladas con ira y odio sobre los hechos”.

Los comentarios de Ressa se suman a la presión reciente sobre Facebook, una plataforma utilizada por más de 3.000 millones de personas, después de que una ex empleada denunciase a la compañía por anteponer el beneficio económico a la necesidad de frenar el discurso del odio y la desinformación. Facebook niega las acusaciones. Un representante de Facebook en Filipinas no respondió a la solicitud de Reuters sobre los comentarios de Ressa. Ressa compartió el Nobel con el periodista ruso Dmitry Muratov el viernes. El comité premió la valentía de los dos reporteros para denunciar la corrupción y el mal gobierno en Filipinas y Rusia.

Facebook, por su parte, se ha convertido en el mayor distribuidor de noticias del mundo y “sin embargo, está sesgado en contra de los hechos, está en contra del periodismo”, dijo Ressa. “Si no tienes hechos, no puedes tener verdades, no puedes tener confianza. Si no tienes ninguno de estos, no tienes democracia”, añadió. “Más allá de eso, si no tienes hechos, no tienes una realidad compartida, por lo que no puedes resolver los problemas existenciales como son el clima o el coronavirus”. Ressa ha sido blanco de intensas campañas de odio en las redes sociales por parte de los partidarios del presidente Rodrigo Duterte, que, según dijo, tenían como objetivo destruir su credibilidad y la de su medio “Rappler”.

“Estos ataques en las redes sociales tienen un propósito, están dirigidos, se usan como un arma”, dijo la ex periodista de CNN. Rappler ha publicado noticias de investigación sobre la guerra mortal de Duterte contra las drogas y una serie de informaciones sobre lo que dice es la estrategia de su gobierno para “armar” Internet, utilizando blogueros en nómina para provocar la ira entre los partidarios internet que amenazan y desacreditan a los críticos de Duterte.

Silencio de Duterte

Duterte no se ha pronunciado sobre el premio de Ressa. El palacio presidencial, el portavoz de Duterte, su principal asesor legal y la oficina de comunicaciones tampoco respondieron a las solicitudes de comentarios de Reuters. En marzo de 2019, Facebook eliminó una red en Filipinas por “comportamiento no auténtico coordinado y la vinculó con un empresario que había dicho anteriormente que ayudó a gestionar la campaña electoral del presidente en las redes sociales en 2016.

Los filipinos encabezan en el mundo el tiempo dedicado a las redes sociales, según estudios de 2021 realizados por empresas de gestión de redes sociales. Plataformas como Facebook se han convertido en campos de batalla políticos y han ayudado a fortalecer la base de apoyo de Duterte, por lo que fueron fundamentales en su victoria electoral en 2016 y una derrota de sus aliados en las elecciones de mitad de mandato. Filipinas acudirá en mayo a las urnas para elegir un sucesor de Duterte, quien, según la constitución, no puede postularse para otro mandato. Sí se presentará su hija, Sara Duterte, muy popular entre los filipinos, para ser el relevo.

Esa campaña “será una batalla por los hechos”, dijo Ressa. “Vamos a seguir asegurándonos de que nuestro público vea los hechos, los entienda. No vamos a ser acosados o intimidados para que guardemos silencio”.