Londres

Cameron quiere permitir a los servicios secretos espiar las comunicaciones

El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, dijo hoy que dará a los servicios secretos más competencias para espiar las comunicaciones privadas, a fin de prevenir el terrorismo, si gana las elecciones del próximo mayo. En un acto en Nottingham (centro de Inglaterra) para presentar el manifiesto del Partido Conservador, adelantó que introducirá una ley para legalizar el acceso de los servicios secretos a las comunicaciones de los ciudadanos, en especial las digitales, y a sus actividades en internet.

“El primer deber de cualquier Gobierno es proteger al país y a los ciudadanos”, declaró, citado por los medios británicos.

Los atentados de la semana pasada en París “han demostrado una vez más la escala de la amenaza terrorista que afrontamos y la necesidad de que las agencias de seguridad e inteligencia y la Policía tengan fuertes competencias para mantener a nuestra gente a salvo”, opinó.

“Me siento cómodo con que las competencias que creo que necesitamos, sean en información sobre comunicaciones o en su contenido, son absolutamente adecuadas en una democracia moderna y liberal”, aseveró.

La actual legislación sobre acceso a las comunicaciones privadas expira en 2016, por lo que el Gobierno que resulte de las elecciones del 7 de mayo próximo tendrá que legislar al respecto, en medio de un debate en el Reino Unido entre los que favorecen ampliar las competencias del Estado y los que defienden el derecho a la privacidad.

Hasta ahora, el Gobierno de Cameron no ha conseguido dar a los servicios secretos esas competencias para examinar libremente todas las comunicaciones, por la oposición de organizaciones de defensa de los derechos, la opinión pública y los liberaldemócratas, sus socios en la coalición.

“Si soy elegido primer ministro, me aseguraré de que hay una legislación bien completa que garantice que no permitimos a los terroristas tener un espacio seguro para comunicarse entre ellos”, manifestó.

El acceso a las comunicaciones de los ciudadanos ha sido motivo de debate desde que el exanalista de la agencia de seguridad estadounidense NSA Edward Snowden reveló programas secretos de espionaje masivo de los Gobiernos británico y de EEUU.

El Ejecutivo de Cameron ha aumentado ya las competencias de las agencias de seguridad al permitir la retirada en el Reino Unido del pasaporte de presuntos yihadistas británicos y que se deniegue temporalmente el retorno a este país a los nacionales que hayan combatido en países como Siria e Irak.

Esta legislación, que actualmente tramita el Parlamento, ha sido objeto de crítica por parte de diputados y organizaciones defensoras de los derechos, pues el veto de entrada se haría sin orden judicial y el sospechoso británico podría convertirse en apátrida.