Tablero geopolítico

China pone a prueba sus intereses en Oriente Medio en el conflicto de Gaza

Putin viaja hoy a Pekín para asistir al foro sobre la ruta de la seda. Ninguno de los dos presidentes, ruso y chino, ha condenado el ataque salvaje de Hamás contra los civiles israelíes

Beijing (China), 16/10/2023.- A handout photo made available by the Russian Foreign ministry press service shows Russian Foreign Minister, Sergei Lavrov (L), shaking hands with China's Foreign Minister, Wang Yi, during their meeting in Beijing, China, 16 October 2023. The Russian president will attend the Third Belt and Road Forum for International Cooperation, which will be held in Beijing on 17-18 October. As part of this trip, he plans to hold talks with the Chinese president. (Rusia) EFE/...
El ministro de Exteriores ruso Sergei Lavrov visita ChinaRUSSIAN FOREIGN MINISTRY PRESS SAgencia EFE

China se prepara para acoger a representantes de 130 países en un foro que se verá ensombrecido por la guerra entre Israel y Gaza, mientras la comunidad internacional espera que Pekín contribuya a la mediación para reducir la violencia. En este contexto, el ministro chino de Asuntos Exteriores, Wang Yi, mantuvo conversaciones con su homólogo ruso para pedir un alto el fuego en el conflicto entre Israel y Hamás, que se reanuden las conversaciones bilaterales de paz y que el Consejo de Seguridad de la ONU actúe para ayudar a resolver la crisis. En la reunión celebrada este lunes en Pekín, el funcionario chino expresó al jefe de la diplomacia del Kremlin, Serguéi Lavrov, que el Consejo de Seguridad, del que China y Rusia son uno de los cinco miembros permanentes, «debe tomar medidas, y las grandes potencias deben desempeñar un papel activo», según un comunicado del Ministerio de Exteriores chino.

«Es imperativo que se establezca un alto el fuego, que las dos partes vuelvan a la mesa de negociaciones y que se establezca un corredor humanitario de emergencia para evitar un desastre humanitario mayor», enfatizó Wang.

Las dos partes también se reunieron en septiembre en Moscú. En aquella ocasión, Wang elogió la «cooperación estratégica» entre ambos países y su compromiso común en favor de un «orden mundial más justo». Además, subrayó «la importancia de garantizar la justicia en los asuntos mundiales, para asegurar el equilibrio de intereses en los procesos que se desarrollan en diversas direcciones».

Al parecer, Putin, en lo que sería su segundo desplazamiento fuera de Rusia este año (el primero fue la semana pasada a Kiriguistán), asistirá al Foro de la Franja y la Ruta los días 17 y 18 de octubre. Su misteriosa e inminente llegada tendrá como objetivo fomentar la asociación «sin límites» entre las potencias. Debido a la orden de detención dictada por el Tribunal Internacional de Justicia contra el líder ruso por la supuesta deportación de niños de Ucrania y otros crímenes de guerra, este año no ha podido asistir a otras citas mundiales, como la cumbre de los BRICS o la del G20. Desde el punto de vista geopolítico, esta contienda pone de manifiesto un creciente alineamiento informal entre China y Rusia (ninguna de las dos condenó el ataque de Hamás) e Irán, lo que podría suponer nuevas amenazas para Estados Unidos si se intensifica la guerra en Ucrania, o las decididas acciones militares de China en torno a Taiwán y los mares de China Oriental y Meridional.

Tras su escala en Pekín, Lavrov realizará una visita oficial a Corea del Norte de dos días, a partir del 18 de octubre, en medio de la preocupación de Occidente por la ampliación de la cooperación militar entre Moscú y Pyongyang. El anuncio se produce un mes después de que el dictador norcoreano y su homólogo ruso se reunieran en la región rusa de Amur, supuestamente para discutir el apoyo de Moscú a los programas de tecnología espacial y de misiles norcoreanos. Washington acusó a Kim Jong Un de suministrar armas a Putin para su guerra contra Ucrania, incluidos más de 1.000 contenedores de material militar y munición, entregados entre el 7 de septiembre y el 1 de octubre.