Guerra en Ucrania
El ejercito ucraniano refuerza su filas con una nueva división de combatientes sudamericanos
Brasil aporta unidades de asalto urbano a la Segunda Legión Internacional, mientras cerca de 400 voluntarios aguardan en lista de espera para incorporarse al frente
El frente de Donetsk ha ganado un aliado inesperado: un contingente de brasileños integrado en la Segunda Legión Internacional de Ucrania que, según el medio especializado Reporting from Ukraine, ya participa en operaciones de emboscada y desarme de tropas rusas alrededor de Pokrovsk. Su experiencia en combate urbano contra la delincuencia y su rapidez para adaptarse al terreno boscoso ucraniano han convertido a estos voluntarios en un elemento clave para frenar los avances enemigos y asegurar flancos que llevaban meses bajo presión.
La mayoría de los combatientes procede de cuerpos de policía federal y militar brasileña y muchos descienden de la colonia ucraniana del estado de Paraná, donde residen unas 600.000 personas con raíces en el país eslavo.
Aunque el número exacto de brasileños en combate no se ha hecho público, se confirma que unos 400 voluntarios aguardan autorización para incorporarse a las filas ucranianas, atraídos por sueldos que oscilan entre 3.000 y 4.000 euros mensuales, muy por encima de los 400 euros que puede ganar un agente federal en Brasil.
Moscú estudia devolver a los norcoreanos al frente
El contrapunto a este refuerzo sudamericano llega desde el lado ruso. El Kremlin podría estar preparando una nueva remesa de soldados norcoreanos para paliar la escasez de efectivos.
Tras el paso por Kursk de unos 12.000 soldados de Pyongyang, ahora se baraja la creación de un batallón especial de 3.000 hombres que sería desplegado en las inmediaciones de Sudzha y posiblemente en Donetsk, armados con material ligero y bajo mando ruso.