Oriente Próximo

Israel mata en Líbano a un cabecilla de las fuerzas de élite de Hizbulá

Ali Ahmed Hasin había lanzado cohetes sobre Israel desde el territorio libanés

El Ejército de Israel confirmó este lunes la muerte del comandante de las fuerzas Radwan en la región de Hajir, el cuerpo de élite de Hizbulá, identificado como Ali Ahmed Hasin, además de otros dos supuestos miembros de Hizbulá, en un ataque aéreo en el sur del Líbano.

"Durante la noche (lunes), aviones de combate de las Fuerzas Aéreas de Israel atacaron y eliminaron a Ali Ahmed Hassin, el comandante de las fuerzas Radwan de la organización terrorista Hizbolá en la región de Hajir", detalló hoy un comunicado castrense, que añade que dos milicianos más de Hizbolá "bajo su mando" fueron también eliminados.

El ataque tuvo lugar en la zona de Sultaniyeh, en el sur del Líbano, y según Israel, Hasin tenía un rango equivalente al de comandante de brigada y había sido el "responsable de planificar y perpetrar ataques" contra civiles israelíes en el norte del país.

"Desde el inicio de la guerra (en Gaza), Hasin realizó numerosos lanzamientos (de cohetes) hacia territorio israelí", dice el texto sin dar más detalles.

Este lunes también las tropas israelíes atacaron la infraestructura militar de Hizbolá en Jiam, el sureste de Líbano tras identificar a un miliciano, según detallaron en un comunicado.

Israel también informó de que un dron de Hizbolá cayó la mañana de este lunes en un área abierta de Rosh HaNikra, el norte del país, sin dejar heridos.

"Aviones de combate de nuestro ejército atacaron un complejo militar de Hezbolá en Kfarkela, en el sur del Líbano", agregan en un comunicado castrense.

Ayer se cumplieron seis meses de guerra en la Franja de Gaza, que desencadenó un día después fuego cruzado entre Hizbulá, milicia chií proiraní asentada en el sur de el Líbano, e Israel, provocando el peor pico de tensión en la frontera desde la guerra entre ambos en 2006.

Más de 380 personas han muerto en estos altercados, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 254 bajas de milicianos, algunas en Siria, sin contar las de hoy.

En Israel han muerto 18 personas en el norte (10 militares y 8 civiles); mientras que al otro lado de la frontera han fallecido al menos 361 personas, entre ellos 46 integrantes de otras milicias, un soldado libanés y 60 civiles, incluidos diez menores y tres periodistas, además de los combatientes de Hizbulá.

El cruce del fuego se ha intensificado mucho en las últimas semanas, con Israel ampliando su radio de actuación a áreas alejadas de la frontera común, lo que hace temer una guerra abierta entre las partes. Israel dice que en estos seis meses de guerra, Hizbolá ha lanzado contra su territorio alrededor de 3.100 proyectiles.

Unos 80.000 vecinos de las comunidades israelíes cercanas a la frontera libanesa siguen evacuados y más de 90.000 del lado libanés.