Terrorismo

Al menos 64 personas mueren en un ataque yihadista doble en Mali

El ejército maliense organizó una misión de respuesta y consiguió abatir a 50 terroristas

Un 'casco azul' de la MINUSMA en Malí MINUSMA 16/06/2023
La ONU constata más de 1.000 civiles muertos y 445 heridos por la violencia en Malí durante los últimos 12 mesesMINUSMAEuropa Press

Al menos 49 personas han muerto este jueves en un ataque terrorista en Mali. Igualmente, otros quince militares fallecieron en un asalto a una base militar y 50 terroristas fueron abatidos en una operación que pretendía dar respuesta a los dos ataques previos. Pero los números nunca son exactos en ese lugar donde nadie mira. Pueden ser algunos más. Pueden ser menos. Sólo está claro que las muertes como consecuencia del yihadismo aumentan en Mali y sin vistas a acabar, mientras el Gobierno maliense apenas si logra manejar la situación con la ayuda de su recién adquirido armamento de fabricación rusa (aeronaves Su-25), china (vehículos de transporte de tropas) y turca (drones Bayraktar TB2).

El ataque contra los civiles fue a traición. El barco de transporte Timbuktu surcaba las aguas del río Níger que llevan de la localidad de Gao a Mopti, en una zona cada vez más afectada por la insurgencia yihadista, con decenas de civiles acomodados su interior: niños, cabras de balidos mansos y gallinas atadas por las patas. No era este un barco militar. Y los terroristas pertenecientes al grupo JNIM abrieron fuego a las 11 de la mañana del jueves y los mataron. El gobierno de Mali ha establecido tres días de luto nacional como consecuencia de lo sucedido, aunque el temor inherente que posee a la junta militar, cuyas derrotas se enfrentan directamente a su línea de propaganda aparentemente victoriosa, impide conocer los sucesos en profundidad. Se sabe que les mataron.

Este es el segundo ataque de este tipo sucedido en una semana. El 1 de septiembre, otro barco de la misma compañía que iba de Mopti a Tombuctú fue objeto de un “ataque con armas pesadas (cohetes)” por parte de los yihadistas. El balance informó de un muerto, un niño de 12 años, y dos heridos.

Casi al mismo tiempo que el ataque al barco, este jueves, los terroristas iniciaron otra operación contra la base militar maliense de Bamba, en Gao, donde otros 15 militares fueron asesinados y elevando así el número de víctimas a 64, que es la cifra oficial que han reconocido desde Bamako. Las Fuerzas Armadas de Mali (FAMA) organizaron un rápido contraataque como respuesta a las acciones yihadistas y lograron abatir a cincuenta terroristas, tal y como reza el comunicado número 58 del Gobierno de la Transición: “En respuesta a este doble ataque, una acción combinada aérea y terrestre de nuestras valientes FAMA ha permitido neutralizar a cincuenta terroristas”.

La situación del yihadismo en Mali se agrava después de que la junta militar haya ordenado la retirada de los cascos azules como resultado de un cúmulo de incidencias ocurridas con los representantes de Naciones Unidas en el país, pero también con su Secretario General, Antonio Guterres. Hasta 12.000 soldados y policías que participaban de forma activa en la estabilización del centro y del norte del país se encuentran actualmente en proceso de retirada, con las consecuencias que acarrea. LA RAZÓN ya informó hace varias semanas de nuevas tensiones entre los secesionistas tuareg y las FAMA (apoyadas por un Grupo Wagner cuyo futuro es hoy incierto) por el control de la base de Ber, recién abandonada por el contingente de la ONU y ubicada a 60 kilómetros de la ciudad de Tombuctú.

Tombuctú, cuyos accesos se encuentran acordonados por los yihadistas desde hace un mes. Los camiones tienen prohibido el acceso a la ciudad desde Argelia y Mauritania, entre que el coste de vida se ha disparado y la población civil teme un ataque inminente. Los ataques fluviales de la última semana se deberían a este bloqueo. El empeoramiento en la inseguridad maliense es una consecuencia lógica de la retirada de la MINUSMA (la misión de Naciones Unidas en el país), el repliegue de 2.400 tropas francesas en agosto del año pasado y la reducción a mínimos de la fuerza EUTM Mali de entrenamiento y asesoría de la Unión Europea, todo ello a cambio de un número indeterminado, en torno a 1.000 efectivos, de mercenarios Wagner.