
Terrorismo
Los mercenarios de Wagner abandonan Mali
Incierta situación para el país africano, acosado por las bandas yihadistas, alguna de las cuales "cerca" la capital Bamako

Los mercenarios rusos de Wagner abandonan Mali, según se ha anunciado oficialmente. El país, desde el punto de vista de la seguridad queda en una situación incierta, en un momento de repunte de la actividad de las bandas yihadistas. Expertos antiterroristas internacionalesconocedores de la zona, consultados por LA RAZÓN, han subrayado que la franquicia de Al Qaeda, el JNIM. "cerca" de hecho la capital Bamako y "puede ocurrir cualquier cosa".
Quedan en Mali las inexpertas tropas del África Korps, dependientes de Moscú, cuyo papel para frenar el yihadismo está por ver. Las fuerzas militares nacionales, FAMA, no parecen suficientes como para frenar esta amenaza creciente.
Tras la retirada de las tropas francesas, por las numerosas bajas sufridas y pese a perder los importantes intereses económicos en el país, fue Rusia, a cuyos servicios secretos se señala como inductores de los golpes de estado que se han producido en el Sahel, la que tomó el protagonismo de la seguridad a través de los mercenarios de Wagner.
Las atrocidades contra la población civil perpetradas por los "soldados de fortuna" rusos, denunciadas por los propios yihadistas, lo único que consiguieron fue crear un gran malestar entre la población y, de paso, convertirse en el mejor mandarín de enganche para Al Qaeda y el Estado Islámico. No era de recibo entrar en un poblado y masacrar a todos sus habitantes, incluidos niños, mujeres y ancianos, y hasta animales do mésticos, que por lo visto también eran yihadistas. Y robar lo que les interesaba.
La situación puede empeorar en cualquier momento. El JNIM ya ha cometido atentados en las proximidades de Bamako y se sabe que "células durmientes" se encuentran en la capital a la espera del momento indicado para intervenir.
La vuelta de las tropas occidentales a la zona parece impensable y la única solución a corto y medio plazo sería el plan que en secreto preparan para el Sahel Estados Unidos, Marruecos y Francia, del que ya ha informado LA RAZÓN, incluida la construcció de un aeropuerto en el sur del Sáhara para lanzara operaciones antiterroristas.
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