Elecciones en Alemania

Merkel prepara su sucesión al promover a una líder regional

La canciller designa como secretaria general de la CDU a la presidenta de Sarre, Annegret Kramp-Karrenbauer, vista como su posible relevo.

La canciller alemana, Angela Merkel, y la primera ministra del estado federado de Sarre, Annegret Kramp-Karrenbauer, dan una rueda de prensa conjunta tras una reunión de la ejecutiva del partido en Berlín (Alemania)
La canciller alemana, Angela Merkel, y la primera ministra del estado federado de Sarre, Annegret Kramp-Karrenbauer, dan una rueda de prensa conjunta tras una reunión de la ejecutiva del partido en Berlín (Alemania)larazon

La canciller designa como secretaria general de la CDU a la presidenta de Sarre, Annegret Kramp-Karrenbauer, vista como su posible relevo.

- Consciente que, en el caso de lograr finalmente forma Gobierno, será el último como canciller de Alemania, Angela Merkel designó ayer a Annegret Kramp-Karrenbauer como secretaria general de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU). «He propuesto a Annegret Kramp-Karrenbauer como nueva secretaria general y la propuesta ha encontrado gran respaldo en la cúpula del partido», dijo Merkel, quien con este paso hizo caso a aquellos que piden una renovación interna de la formación.

Precisamente, a sus 55 años, Kramp-Karrenbauer es considerada como una figura cercana a Merkel y su nombre suele ser mencionado cuando se habla de la futura sucesión de la canciller tanto en la presidencia de la CDU como en la Cancillería. «Merkel y Kramp-Karrenbauer han enviado la primera señal clara en el debate sobre la sucesión», escribió poco después del nombramiento el diario «Süddeutsche Zeitung».

Junto a este periódico progresista, otros tantos medios recordaron ayer que Merkel también fue secretaria general de la CDU justo antes de llegar a ser canciller. De hecho, Kramp-Karrenbauer es conocida también como la «Merkel de Sarre», ya que gobierna desde 2011 este Estado federado y tiene unas ideas políticas muy similares a las de la canciller, caracterizadas por su ideología centrista. Algo que, no obstante, ha sido criticado por el ala derecha del partido, que pide un giro conservador para hacer frente al auge de la extrema derecha en Alemania. Con el 13% de los votos, la xenófoba Alternativa por Alemania (AfD) fue el tercer partido más votado en las elecciones del 24 de septiembre. Un sondeo de ayer les colocaba incluso como segunda fuerza al superar a lo socialdemócratas.

Con el creciente descontento por parte del CDU tras las negociaciones de coalición en las cuales Merkel llegó a un acuerdo con los socialdemócratas, se esperaba que la canciller designara como segundo al mando a un líder conservador, el sector más crítico con la concesiones hechas al SPD durante las negociaciones para forma otra Gran Coalición. Sin embargo, el nombramiento de Kramp-Karrenbauer se presenta como una señal de que la canciller quiere continuar con la política que ha defendido durante estos años. «Nos conocemos y sabemos que podemos confiar la una en la otra», aseguró Merkel durante la presentación, aunque también señaló que cada una tiene «su propia cabeza».

En esa línea, la primera ministra de Sarre aseguró que espera impulsar un proceso de «renovación» en la CDU, que tenga en cuenta tanto las raíces liberales como las raíces conservadoras del partido creado por Konrad Adenauer tras la II Guerra Mundial. Pese a la expectación creada por su designación, rechazó considerarse como la «princesa heredera», pues no le gustan las princesas ni en Carnavales.

Kramp-Karrenbauer, apodada AKK, deberá ser elegida en el congreso extraordinario que el partido celebrará el 26 de febrero en Berlín, convocado para dar luz verde al pacto de Gran Coalición con el SPD, cuyas bases tendrán la última palabras en la consulta vinculantes del 4 de marzo.