Defensa

Saltan las alarmas en la OTAN: Putin ha llevado a la frontera con la UE su misil hipersónico

El Kremlin redobla su apuesta militar en Bielorrusia con el envío de más de 1.300 toneladas de munición, un despliegue que coincide con la construcción de una nueva base para el sistema de misiles Oreshnik

Ilustración de un misil hipersónico surcando el cielo
Ilustración de un misil hipersónico surcando el cieloReuters

La sombra de una nueva amenaza se cierne sobre el flanco oriental de Europa. El motivo de la creciente inquietud internacional es la construcción de una gran instalación militar en las inmediaciones de la localidad bielorrusa de Pavlivka, un proyecto rodeado de un secretismo que ha disparado todas las alarmas. Los analistas dan por hecho que su propósito va mucho más allá de un simple cuartel, y la principal hipótesis apunta a que está siendo diseñada para albergar los sistemas de misiles rusos más avanzados. Este tipo de avances se alinea con otras modernizaciones del arsenal ruso, como la incorporación de un nuevo misil que ha hecho todavía más letal al caza de combate Su-57.

En este sentido, un despliegue de estas características en territorio bielorruso alteraría por completo el equilibrio de poder en la región. La ubicación estratégica de la base permitiría a Moscú acercar su capacidad ofensiva a las fronteras de la OTAN, lo que reduciría drásticamente los tiempos de respuesta ante un hipotético conflicto y supondría un nuevo desafío directo para la seguridad de varios países europeos. Esta amenaza directa ha generado respuestas en todo el continente, donde países como Alemania ya buscan adquirir sus propios misiles para reforzar su capacidad de disuasión.

De hecho, esta estrategia de largo alcance se ve respaldada por movimientos logísticos más inmediatos y de una envergadura considerable. Durante las primeras semanas de septiembre, Rusia ha materializado un formidable envío de armamento a su principal aliado, con un trasvase que supera las 1.300 toneladas de munición. Esta cifra, que equivale a unos 20.000 proyectiles de artillería, evidencia la profunda interdependencia militar entre ambos países, según ha desvelado el medio United24media.

El arsenal que alimenta una nueva amenaza en la frontera

Este movimiento logístico se llevó a cabo mediante, al menos, dos convoyes ferroviarios militares. El primero de ellos transportó un cargamento de hasta 300 toneladas de proyectiles con destino a la base de artillería 1405, un punto neurálgico para las fuerzas armadas de Bielorrusia. El segundo tren, sin embargo, fue el que despertó un mayor interés en los círculos de inteligencia al trasladar entre 1.000 y 1.070 toneladas al depósito 1393, incluyendo vagones abiertos que podrían ocultar contenedores para sistemas de misiles.

Por todo ello, la combinación de la nueva base y este masivo flujo de material bélico no parece una coincidencia. Entre los sistemas que podrían desplegarse, el que genera mayor preocupación es el temido "Oreshnik". Se trata de un misil balístico hipersónico desarrollado recientemente por el Kremlin, cuya velocidad y trayectoria impredecible lo convierten en un arma prácticamente imposible de interceptar con las defensas actuales. Su posible presencia en Bielorrusia representaría, sin duda, un punto de inflexión en la escalada de tensión en Europa del Este.