Elecciones en EE UU

Trump busca compañero de "ticket" electoral: ¿quién será su vicepresidente si consigue recuperar la Casa Blanca?

La campaña del republicano asegura que la lista de candidatos «está haciéndose cada vez más larga» y que Trump «está lejos de tomar una decisión»

El expresidente de EE UU Donald Trump
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un mitin de campañaEuropa Press

Donald Trump ha ido subiendo tanto en las encuestas que son muchos los expertos que desde hace tiempo tienen la vista puesta en quien será su compañero de fórmula. El exmandatario y Joe Biden se verán las caras de nuevo el próximo 5 de noviembre, siendo la primera revancha entre dos presidentes de Estados Unidos desde 1956, por eso, es tremendamente importante para ambos rodearse de buenos consejeros y fieles compañeros políticos.

De momento, el exmandatario ya está reforzando su influencia en el partido nombrando a su nuera, Lara Trump (esposa de Eric Trump), junto a su gran amigo, Michael Whatley, líderes del Comité Nacional Republicano (RNC, por sus siglas en inglés). Sin embargo, elegir un vicepresidente no es tarea fácil, sobre todo si tenemos en cuenta que Trump se siente traicionado por su anterior segundo, Mike Pence, que según él no le apoyó en su posición sobre el asalto al Capitolio en enero de 2021.

El exmandatario no suelta detalle sobre quien podría ser el elegido. Ni siquiera ha hecho insinuaciones, de hecho, su asesor principal de campaña, Jason Miller, dijo después del Supermartes, que «la lista está haciéndose cada vez más larga» y Trump «está lejos de tomar una decisión». No es una decisión fácil, porque la elección de uno u otro candidato también es una estrategia para atraer a un perfil de votantes entre los que Trump no está del todo afianzado. Por ejemplo, las mujeres de los suburbios.

El partido republicano, por su parte, ya ha comenzado el casting de potenciales compañeros de fórmula y algunos nombres han salido a la luz, como el senador Tim Scott, quien fue su rival al inicio de las primarias del partido y trató durante su corta campaña de no enfrentarse directamente al exmandatario por lo que pudiera pasar después. De hecho, desde que se retiró de la contienda lo ha defendido, y tiene un perfil interesante porque es uno de los republicanos negros más destacados del país. Eso podría arrastrar a un grupo de votantes clave en estos comicios que además fueron quienes ayudaron a Biden a abrirse camino en las pasadas elecciones gracias a su apoyo en estados como Carolina del Sur.

También está encima de la mesa el nombre de Elise Stefanik. La dura congresista del norte del estado de Nueva York. De ella Trump ha llegado a decir, a modo de piropo, que es «toda una asesina», por un interrogatorio que hizo la republicana de 39 años acerca del antisemitismo en el campus universitario. Hay rumores de que ocupa una alta posición en la lista de opciones para vicepresidenta por su lealtad al exmandatario y su capacidad para generar noticias, algo que podría ser tremendamente irresistible para Trump.

El gobernador texano Greg Abbott también ha ganado muchos puntos. Tiene muy buena relación con el exmandatario y ha sido el azote de los inmigrantes ilegales a los que tanto ataca Trump. Elegirlo compañero de fórmula remarcaría el compromiso del candidato republicano con solucionar los problemas en la frontera y Abbott es un político con mucha experiencia al que le gusta la mano dura, quizá demasiado, lo que podría asustar a los votantes más indecisos y menos radicales.

Otro de sus rivales en las primarias, el empresario Vivek Ramaswamy, también podría ser candidato a vicepresidente. Con la de problemas económicos ligados a sus causas legales que tiene Trump, un aliado con buena solvencia económica nunca es baladí. Además, es un joven indio de Ohio, todo lo contrario, a Trump, por lo que podría atraer a un grupo de votantes con los que el expresidente no cuenta. Quizá su gran problema es la falta de experiencia en política.

Melania Trump también tiene su favorito. La ex primera dama ha dicho que le gustaría Tucker Carlson como compañero de fórmula de su marido. El experto conservador fue un pilar importante en la cadena Fox News hasta su despido en abril de 2023 por lo que sería de gran ayuda en el impulso de la campaña del expresidente. En su contra tiene que podría eclipsar a Trump, y eso el republicano no lo lleva bien, además puede no ser una gran opción para los republicanos más moderados por su conocido extremismo.

Otro nombre que se baraja como compañero de fórmula es el del senador James David Vance. Él mismo ha mostrado públicamente interés en el puesto de candidato a vicepresidente, y Trump lo tienen en buena estima. A pesar de que en 2016 el senador acusó a Trump de ser «un fraude total» y en 2019 aseguró ser un anti-trumpista. Sin embargo, en una encuesta que se hizo durante la celebración de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC, por sus siglas en inglés) quedó claro que su nivel de popularidad no es muy alto.

También está sobre la mesa quien fue su secretaria de prensa en la Casa Blanca durante la presidencia de Trump, Sarah Huckabee Sanders. Es una de las mujeres más jóvenes del partido republicano y eso podría ayudar a Trump a ganar el voto femenino en los suburbios. Sin embargo, su postura agresiva podría también espantara este electorado. Sanders fue de las primeras en respaldar a Trump el pasado noviembre describiéndolo como «mi exjefe, mi amigo y el presidente favorito de todos».