Reino Unido

Violó a una adolescente de 16 años pero no será deportado: un juzgado sueco dice que no fue "excepcionalmente grave"

El agresor, un refugiado eritreo de 19 años, fue condenado a prisión pero permanecerá en Suecia tras una polémica decisión judicial

FILE - A woman takes a picture of parliament as scaffolding stands around the London landmark, almost up to the clock face, in London, Wednesday, Oct. 11, 2017. (AP Photo/Kirsty Wigglesworth, File)
El agresor, un refugiado eritreo de 19 años, fue condenado a prisión pero permanecerá en Suecia tras una polémica decisión judicialASSOCIATED PRESSAgencia AP

El caso de Yazied Mohamed, un refugiado eritreo de 19 años condenado por violar a una adolescente en Suecia, ha generado una fuerte polémica luego de que el tribunal decidiera no deportarlo, alegando que el delito cometido no fue “excepcionalmente grave”. La información fue publicada por el diario británico Daily Mail.

La víctima, Meya Aberg, de 16 años, fue atacada mientras regresaba a casa tras su turno en un restaurante McDonald's en la ciudad de Skellefteå. Al haber perdido el autobús, caminaba sola cuando Mohamed le arrebató el teléfono y la arrastró a un túnel, donde la agredió sexualmente. La joven logró liberarse y su familia denunció el hecho, aunque inicialmente el agresor fue absuelto por falta de pruebas.

Posteriormente, tras una apelación, el tribunal condenó a Mohamed a tres años de prisión y al pago de 240.000 coronas suecas (unos 19.000 euros) en concepto de indemnización. Sin embargo, la corte rechazó la solicitud de deportación presentada por la fiscalía, argumentando que “la naturaleza y duración del delito, aunque grave, no constituye una ofensa excepcionalmente seria que justifique la expulsión”.

La decisión ha sido duramente criticada por figuras públicas como el exministro británico Nadhim Zahawi, quien calificó el fallo como “una locura” y “una injusticia para la víctima y su familia”. En declaraciones recogidas por Daily Mail, Zahawi instó a Suecia a “despertar” y revisar sus leyes migratorias.

La propia víctima expresó su dolor en medios locales: “Quiero decir que lo odio y que me ha destruido”. El caso ha reavivado el debate sobre la política migratoria en Suecia, especialmente tras otros incidentes similares que involucran a solicitantes de asilo.