10 consejos (saludables) para teletrabajar durante el confinamiento por el coronavirus

El estado de alarma decretado por el Gobierno para evitar la propagación del coronavirus en España ha provocado que los trabajadores tengan que desempeñar su jornada laboral desde casa. La entidad líder en servicios técnicos, de seguridad y certificación a nivel mundial, TÜV Rheinland, ofrece estos consejos para teletrabajar de manera segura y saludable.

La situación del Covid-19 ha hecho que la oficina deje de ser el lugar de trabajo para la mayoría de las empresas, excepto los supermercados, hospitales y establecimientos de servicios básicos. Un nuevo escenario al que se tienen que ir adaptando los empleados mientras siga vigente el estado de alarma.

Cumpliendo con lo establecido en el RD-Ley 8/2020, TÜV Rheinland, entidad líder en servicios técnicos de seguridad y certificación nivel mundial, ha adaptado con carácter temporal y extraordinario el teletrabajo. De forma excepcional, la evaluación de riesgos ha sido efectuada con la modalidad auto-evaluación, y adicionalmente se han hecho llegar estas medidas preventivas a todo su personal.

Para seguir siendo productivos y mantener unos hábitos saludables y sostenibles, Anna Gil, directora de Calidad y Health, Safety and Environment (HSE) de TÜV Rheinland en España, propone estos consejos:

1) Dedicar un espacio: Elegir una parte de la casa donde se tenga todo lo necesario para trabajar. Lo idóneo es que sea un lugar bien iluminado, a poder ser con luz natural. Y, por supuesto, mantener el orden y la limpieza.

2) Evitar la fatiga visual: Ubicar el puesto de trabajo en una posición que evite reflejos y deslumbramientos. Colocar la pantalla a una distancia de entre 50-60 cm en línea de visión horizontal. Los caracteres deben poder apreciarse fácil y nítidamente. De este modo, hay que mantener la distancia correcta y así evitar la fatiga visual, giros de cuello y cabeza.

3) Mantener la estructura de la jornada laboral: Realizar las mismas acciones como si hubiera que desplazarse a un lugar de trabajo. Levantarse, desayunar, ducharse, peinarse, lavarse los dientes y vestirse como si se fuera a la oficina. No tener horarios afecta los ritmos circadianos y la estabilidad emocional.

4) Seguir con la higiene muscular: Utilizar un asiento ergonómico, en el que la espalda quede apoyada por completo. Los pies deben quedar apoyados en el suelo, manteniendo las rodillas al mismo nivel que las caderas, en ángulo de 90º. Los brazos deben mantenerse en ángulo recto y apoyados en la mesa de trabajo. Esto ayudará a evitar problemas de espalda, de visión o dolencias articulares y musculares.

5) Cuidarse los oídos: Utilizar cascos con un auricular por oído para las reuniones. No poner el volumen alto. Alternar con el altavoz del PC. Mantener los cascos quitados cuando no se estén utilizando.

6) Tomarse respiros: Desconectar diez minutos cada dos horas. Dejar lo que se esté haciendo, cerrar la puerta del estudio, cambiar de ambiente y realizar otra actividad durante ese tiempo. ¡No utilices ese descanso para realizar tareas domésticas! Hay que moverse, caminar y estirar para evitar mantener la misma postura durante muchas horas.

7) Evitar distracciones: La música ambiente puede ayudar a concentrarse, la televisión no. En general, evitar emisiones que tengan cortes publicitarios, pensados para captar la atención.

8) Comunicarse con los compañeros: Hay multitud de herramientas que ayudan a mantenerse en contacto con ellos. Hay que saber interpretar el tono de la conversación, porque habrá momentos de trabajo y otros de distensión. En estos momentos, es el aislamiento es el principal reto a superar, por lo que la solidaridad y la cohesión es lo más importante.

9) Comer bien: Controlar el picoteo y no comer por impulso. Plantear semanalmente el menú, seguir con los horarios de comidas habituales y no comer en la mesa de trabajo. Evitar comprar snacks y alimentos ‘basura’. Las zanahorias, fruta o infusiones son una buena alternativa. Un consejo: contar hasta diez y fijarse en si hay síntomas físicos de hambre.

10) Hacer ejercicio físico: La situación actual no es excusa para el sedentarismo. Es importante permanecer activos en casa, tanto para evitar trastornos musculoesqueléticos como para controlar la ansiedad. Es necesario buscar ejercicios y marcarse una rutina para realizarlos, ya que ayuda no solo a desahogarse sino que también fortalece el sistema inmunitario.