Casas Reales

De Charlène a Carolina de Mónaco, los looks más glamurosos de las Grimaldi en los 20 años de Alberto como soberano

Vestidos joya, tweed y guiños a la Alta Costura: así celebró la familia real monegasca las dos décadas de reinado de su príncipe

Charlène de Mónaco.
Charlène de Mónaco.Gtres

Este fin de semana la Familia Real monegasca está de celebración, y es que ayer se conmemoraron dos décadas desde que Alberto de Mónaco está al frente de la corona. La familia Grimaldi al completo se dio cita en los jardines del Principado para rendir homenaje al soberano en una velada que combinó historia, emociones… y mucha moda. Como ya es tradición, las mujeres del clan desplegaron su mejor artillería estilística con looks que resumen a la perfección el sello Grimaldi: sofisticación, elegancia clásica y algún que otro guiño de tendencia.

La ocasión era solemne, pero también festiva, por eso vimos vestidos de cóctel en tonos suaves, tejidos fluidos, texturas ricas y accesorios discretos. Una lección de estilo royal en la que cada generación imprimió su sello: desde la impecable Carolina de Mónaco hasta una favorecedora Alexandra de Hannover, pasando por una Charlène que, una vez más, fue protagonista absoluta.

Los looks de las mujeres Grimaldi al detalle

Charlène de Mónaco fue la imagen del romanticismo depurado con un vestido rosa empolvado sin mangas y escote redondo, de silueta entallada y cinturón a juego marcando la cintura. El diseño destaca por una falda asimétrica rematada en encaje floral a tono, que aporta movimiento, textura y ese aire couture que tan bien domina la princesa. Lo combinó con salones blancos de punta fina, maquillaje en clave suave y un recogido pulido que dejaba el protagonismo total al vestido. Una elección que refuerza su imagen de sobriedad elegante, con un leve toque etéreo.

Charlène de Mónaco.
Charlène de Mónaco.Gtres

Carolina de Mónaco, siempre fiel a su estilo atemporal con guiños vintage, se decantó por un vestido blanco de escote en V y mangas largas bordadas con pedrería, que aportaban brillo sutil sin caer en excesos. La falda de volantes horizontales aportaba volumen ligero y dinamismo al look. Complementó con salones beige de punta redondeada y un bolso con cadena metalizada (todo apunta a que puede ser un Chanel con mucha historia). Un look que respira alta costura retro, muy en su línea. Su hermana pequeña, Estefanía de Mónaco, mucho más minimalista, optó por un vestido corto en crudo de corte recto y manga corta, de cuello bebé. Lo interesante del conjunto estuvo en los accesorios: un bolso tipo bombonera completamente bordado en perlas y unos zapatos slingback blancos, que elevaban sin estridencias un outfit aparentemente sencillo.

Carolina y Estefanía de Mónaco.
Carolina y Estefanía de Mónaco.Gtres

Alexandra de Hannover, por su parte, se mantuvo fiel a su estilo fresco y parisino con un vestido sin mangas confeccionado en un tweed multicolor de base blanca evocando los códigos más clásicos de Chanel. Un diseño vibrante y juvenil, con guiños a la alta costura francesa e ideal para una royal de su edad. El peinado suelto y natural, junto a los complementos discretos, completaban este look effortless con mucha intención.

Alexandra de Hannover.
Alexandra de Hannover.Gtres

En un evento donde se celebraban los 20 años de reinado de Alberto, la moda fue también protagonista silenciosa. Un desfile que nos recuerda por qué la familia Grimaldi sigue siendo uno de los referentes de estilo más potentes de la realeza europea.