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Solo queremos llevar vaqueros si es como Carmen Lomana en Venecia con chaqueta elegante de pata de gallo

Porque solo ella puede convertir un estilismo con jeans en puro lujo.

Carmen Lomana en Venecia con un estilismo ideal.
Carmen Lomana en Venecia con un estilismo ideal.@carmen_lomana

El otro día fue Carlota Casiraghi en París, y hoy es Carmen Lomana en Venecia . Porque nuestra querida Carmen Lomana y su amiga, la periodista especializada en belleza e hija de los marqueses de Poza, Teresa de la Cierva, están disfrutando de unos días en la ciudad italiana y no nos deja de inspirar con sus estilismos de lo más elegantes. Y es que la escapada de Carmen Lomana a Venecia con motivo del lanzamiento de un perfume dedicado a Maria Callas, ícono de la ópera del siglo XX y de los desamores mediáticos. Como una turista más, desde los típicos y lujosos taxis de la ciudad, en los que los actores más famosos del mundo también hacen sus grandes apariciones durante el Festival de Cine de Venecia, Carmen nos ha enamorado de nuevo con sus estilismos y hoy ha sido con estos vaqueros pitillo y chaqueta de pata de gallo que nos ha recodado mucho al estilismo de Carlota en París. Elegancia en estado puro.

Carlota Casiraghi decidió ponerse unos vaqueros pitillo a juego con una camiseta blanca muy básica, con un abrigo tres cuartos confeccionado en un tejido grueso que tiene textura de tweed pero que curiosamente presenta los motivos de la pata de de gallo en blanco y negro, y Carmen Lomana lo ha hecho con una chaqueta de pata de gallo pero en burdeos y blanco. Sin duda, dos reinas de la elegancia. Tras unos años donde parece que la tónica general en cualquier pantalón era el corte recto, puede que esto haya llegado a su fin. Las tendencias más nostálgicas se han empeñado en el último tiempo en resucitar los pantalones de campana tan característicos de la década de los 70, mientras que las amantes de los 80 apostaban por el modelo slouchy, y las de los 90 por el wide leg o silueta ancha que conquistan a celebrities de la talla de Sara Carbonero.

Solo había un corte que parecía no volver por ninguna parte, el pantalón pitillo, pero Carmen Lomana ha vuelto a demostrar que el vaquero pitillo es tendencia eterna y siempre hace tipazo. Ni pasados de moda, ni prohibidos a los sesenta: los pitillos se siguen llevando. Y así de bien.