Londres

Craig David enciende las luces de la Navidad más solidaria de Londres

A falta de 48 noches para la Navidad, 1.778 bolas y estrellas doradas y plateadas coronan la calle comercial más larga de Europa, bajo el eslogan "Little Stars"(Pequeñas estrellas)

La calle Oxford Street con la luces de Navidad
La calle Oxford Street con la luces de Navidadlarazon

El cantante británico enciende las luces de Navidad de la calle Oxford Street, un evento en el que participó por primera vez con una organización que lucha contra el abuso infantil.

El cantante británico Craig David encendió hoy las luces de Navidad de la calle Oxford Street, en el corazón de Londres, un evento en el que participó por primera vez con una organización que lucha contra el abuso infantil.

A falta de 48 noches para la Navidad, 1.778 bolas y estrellas doradas y plateadas coronan la calle comercial más larga de Europa, bajo el eslogan "Little Stars"(Pequeñas estrellas).

Este año, por primera vez, los organizadores se han asociado con la entidad de protección de la infancia NSPCC, en una campaña que lucha contra el abuso infantil, y han dado la oportunidad a todos los británicos de bautizar una luz del alumbrado a cambio de una donación de 5 libras (5,62 euros).

"Mucha gente ha participado con sus donaciones a través de internet", declaró a Efe Emilia Constantin, una voluntaria de NSPCC, que recolectaba dinero en la transitada calle, quien añadió que "hoy NSPCC está recibiendo muchas donaciones de los viandantes, a pesar de la lluvia".

El artista encargado de encender las 750.000 bombillas led este año fue David, quien tomó el relevó a la cantante australiana Kylie Minogue.

El compositor, que en septiembre pasado lanzó su sexto álbum "Following My Intuition", seis años después de su último trabajo, dijo que ha sido un gran honor para él ser el encargado de encender las luces y deseó al público una "Feliz Navidad"y un "increíble 2017".

Por primera vez en cuatro años, se cortó el tráfico en la popular vía, por lo que, desde el mediodía, millones de visitantes pudieron dar la bienvenida por adelantado a esta festividad a su ritmo y con tranquilidad.

"Venimos a ver el encendido de las luces cada año y este año no nos podíamos perder a Craig David", comentó emocionada Emma Ruglys, acompañada por su madre y una amiga, con las que esperó una fila más de tres horas para ver el alumbrado en primera línea.

En esta edición el evento giró en torno a los más pequeños de la casa, que pudieron disfrutar de talleres, pintarse la cara de mariposa o su superhéroe favorito o montar en "My Little Ponny bus", un autobús decorado con motivos infantiles.

Otra atracción que triunfó fue el Monopoly de 10 metros por 10 metros, en el que multitud de personas lanzaron un dado gigante y movieron fichas de casi dos metros en forma de coche, dedal, zapato o terrier escocés, con la esperanza de ser uno de los 50 ganadores de 200 libras (224,8 euros).

Los viandantes pudieron disfrutar del espíritu navideño con sus cinco sentidos, ya que el olor a dulces, canela y salchichas inundó los casi dos kilómetros de vía desde primera hora.

Además, el solista Nathan Sykes, la banda "The Vamps"y Louisa Johnson, ganadora del programa televisivo Factor X, hicieron bailar a los asistentes y tararear conocidas melodías.

Oxford Street es la primera calle de Londres que ilumina el oscuro invierno de 2016 y, con este acontecimiento, se ha dado el pistoletazo de salida a la temporada de compras navideñas.

A partir de la semana que viene también se iluminarán otras calles, como Carnaby Street, Bond Street y la plaza de Duke of York, todas en el centro de la capital.

La tradición de recubrir las calles con luces por estas fechas surgió a raíz de un artículo que publicó a mediados del siglo pasado el periódico británico "The Daily Telegraph", en el cual señalaba lo apagado que resultaba Londres durante las Navidades.

En 1954 los negocios de Regent Street -calle que atraviesa Oxford Street y que este año se iluminará el 17 de noviembre- se organizaron para decorar la calle con luces navideñas.

Cinco años más tarde los almacenes de la calle vecina se pusieron de acuerdo para hacer lo mismo en Oxford Street.

Durante la recesión económica de finales de los años sesenta, el centro de Londres volvió a apagarse por Navidad, pero ya en 1978 se retomó la tradición de vestir las calles de luces y llenar los escaparates de adornos navideños para atraer a más compradores.

Efe