Castilla y León

Fuentes de Oñoro homenajea a Miguel Ángel Blanco dedicándole un parque

Salgueiro recuerda que han sido las Fuerzas de Seguridad del Estado las que «han arrinconado a ETA hasta su final»

María José Salgueiro junto a María del Mar Blanco, Javier Iglesias, Juan José Aliste e Isidoro Alanís, inauguran el parque / José Vicente/Ical
María José Salgueiro junto a María del Mar Blanco, Javier Iglesias, Juan José Aliste e Isidoro Alanís, inauguran el parque / José Vicente/Icallarazon

La localidad salmantina de Fuentes de Oñoro homenajeó al concejal del PP en Ermua, Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA en julio de 1997 dedicándole un parque con su nombre como «forma de honrar la memoria de todas las víctimas generadas por la violencia de la banda terrorista durante su existencia».

Así lo aseguró la delegada del Gobierno de España en Castilla y León, María José Salgueiro, quien presidió el acto y defendió que ETA «ha sido derrotada por la fortaleza de la democracia española» y, en ese sentido, consideró como «únicos artesanos de la paz» a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que, junto a jueces y fiscales «han arrinconado a los terroristas hasta su final».

Por ello, afirmó que «no le debemos nada a la banda» y aseguró a las víctimas que «se van a seguir investigando los crímenes para que los terroristas sean detenidos y juzgados».

También estuvo presente en la inauguración del parque la hermana del fallecido y presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, María del Mar Blanco, quien definió esa instalación como «símbolo de resistencia y constancia» en defensa «de los principios democráticos».

«Encontrar muestras de solidaridad de las instituciones y el afecto de los ciudadanos es fundamental para saber que no estamos solos», explicó Blanco, quien recordó que estos actos se enmarcan en «la defensa de los principios de verdad, memoria, dignidad y justicia» y suponen un «símbolo de resistencia ante la utilización de la vida humana por parte de los fanáticos».

Asimismo, recordó el momento del asesinato de su hermano como el punto donde «la mayoría social antepuso su dignidad a la apatía y el miedo» y afirmó que «el compromiso de Miguel Ángel por la vida permanece en la conciencia de la gente de bien».

Por su parte, el alcalde del municipio, Isidoro Alanís, recordó a los 859 asesinados por ETA, las 2.600 víctimas que sobrevivieron a los atentados y a las familias que sufrieron el terrorismo.