La Catedral de Burgos acoge la primera exposición de Venancio Blanco centrada en la Pasión de Cristo

La exposición «Et Incarnatus Est. Venancio Blanco. Obra religiosa» acercará a Burgos el trabajo del escultor Venancio Blanco en torno a la Pasión del Cristo a partir del próximo 22 de julio, cuando se realizará la inauguración oficial. Una muestra gratuita que se podrá ver hasta el 27 de octubre y que contará de 29 piezas, ubicándose en la sala Valentín Palencia de la Catedral, dentro de los actos conmemorativos por sus 800 años.

Organizada conjuntamente por las Fundaciones VIII Centenario, Venancio Blanco y Siglo, la exposición comenzó a fraguarse cuando Venancio Blanco vivía, tal y como ha recordado la comisaria Nuria Urbano, quien ha destacado que las piezas escogidas son «muy elegidas, de las más importantes que alberga el imaginario Plástico religioso» del escultor castellano y leonés.

La Pasión de Cristo ha ocupado un espacio muy significativo en el imaginario plástico de Venancio Blanco y, sin embargo, es la primera vez que se va a mostrar de forma aislada, con las principales obras que versan sobre la iconografía de la Pasión. Entre la selección de las piezas destacan «Nazareno», única escultura de chapa de hierro y de bronce fundido realizada por el artista; el grupo escultórico «El Calvario», que el artista realizó para Mapfre, y una de las versiones de la talle en madera de «Cristo que vuelve a la vida».

Por su parte, la directora general en funciones de Políticas Culturales de la Junta, Mar Sancho, resaltó la figura de Venancio Blanco como «uno de los mejores artistas de nuestro tiempo» ya que pocos «han logrado llevar a cabo una relectura de los clásico con tanto acierto y con tanta verdad».

La mayoría de las obras se encuentran realizadas en bronce, si bien haya algunas piezas en escayola y dibujos al carboncillo y bocetos de las esculturas. Una muestra que toma el relevo a la que ha tenido lugar recientemente sobre Antonio Gaudí y la Sagrada Familia por la que pasaron más de 43.000 visitantes.

Venancio Blanco es un exponente de la neofiguración contemporánea y que trabajó todas las materias, subrayando siempre la importancia del dibujo. Cuenta en su haber con reconocimientos nacionales e internacionales como el Premio Nacional o Gran Premios y Medallas de Oro de Arte de Alejandría o del Arte Sacro de Salzburgo.