Barcelona

Las ampliaciones del carril bici de Colau irritan a comerciantes y vecinos

Hay quejas por los problemas para poder aparcar en segunda fila en algunas zonas de la ciudad

Los carriles bici provocan molestias en las salidas de los colegios en muchas zonas de Barcelona
Los carriles bici provocan molestias en las salidas de los colegios en muchas zonas de Barcelonalarazon

Uno de los últimos informes del Ayuntamiento concretó que casi el 90 por ciento de los barceloneses tiene un carril bici a menos de 300 metros de su casa. A priori, todo un éxito.

Uno de los últimos informes del Ayuntamiento concretó que casi el 90 por ciento de los barceloneses tiene un carril bici a menos de 300 metros de su casa. A priori, todo un éxito. Pero la oposición municipal parece opinar de forma muy diferente, así como parte de la población de algunas zonas de la ciudad.

El propio líder municipal del PP, Alberto Fernández, criticó recientemente a la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, por la implantación de los nuevos carriles bici, que tachó de «chapuza». En un comunicado, alertó de que estos nuevos carriles son «fantasma por su escaso uso» y porque, a su juicio, provocan problemas de movilidad en la ciudad.

«El boom de carriles bici de Colau provocaría un estallido de atascos en Barcelona, agravaría el tráfico y afectaría zonas de carga y descarga», advirtió el líder de los populares.

En declaraciones a LA RAZÓN, el edil popular reiteró la «chapuza» de la idea de ampliar los carriles bici en la ciudad, y lo calificó como un asunto procedente de una «ideología sectaría, es rancio comunismo, es improvisación». Sobre la ampliación del carril bici, señaló que «está mal diseñado», sobre todo en zonas como el barrio de Sant Gervasi, y en las calles Ganduxer y Borí i Fontestà.

A su juicio, uno de los principales problemas es que estos carriles bici «ralentizan la circulación», aparte de que pueden provocar «atascos monumentales». También criticó, al igual que muchos ciudadanos, la presencia de muchas ciclistas en las aceras, un hecho que es muy visible por ejemplo en el distrito del Eixample, y que la mayoría de los usuarios de este tipo de transporte no llevan casco.

La opinión de algunos vecinos y comerciantes es parecida. En algunas zonas hay cierto malestar. Desde el establecimiento Semon, en la calle Ganduxer, aseguraron a este diario «que han habido incidente» relacionados con el carril bici, y también que los clientes «se quejan». El principal motivo de estas quejas están relacionados con el tráfico, debido a que ahora hay menos plazas de aparcamiento, y además existe el problema de estacionar a doble fila.

Pese a que la mayoría de los comercios de esta zona no aportaron excesivas quejas a la presencia del carril bici, el citado responsable de Semon dijo que «sus clientes no parecen conformes» con esta situación, y que uno de ellas «tropezó con uno de los pivotes».

El gobierno de Colau aprovechó el verano para multiplicar los carriles de bici de Barcelona, para preparar la puesta en marcha de una decena de nuevos tramos de vías para ciclistas por toda la ciudad. En realidad trata de paliar los retrasos de uno de sus planes estrella. Uno de los grandes objetivos del gobierno de Colau es triplicar durante este mandato la red de carriles bici de la capital catalana, aunque falta por ver si se podrá realizar.