Cataluña

Los empresarios urgen a formar un gobierno «estable» en la Generalitat

Tras las elecciones, las patronales reclaman que la Generalitat vuelva a poner el acento en la economía

Patronales y empresarios coinciden en volver a pensar en el crecimiento económico tras varias años de centrar todo el discurso político en el proceso independentista
Patronales y empresarios coinciden en volver a pensar en el crecimiento económico tras varias años de centrar todo el discurso político en el proceso independentistalarazon

Nadie sabe a ciencia cierta cuál va a ser el futuro político del president de la Generalitat en funciones, Artur Mas, pero las apuestas están contra él. Tal y como dice la CUP, su participación en el «procés» no es imprescindible. Y quizás tampoco lo sea para el mundo económico. Ha llovido mucho desde que su gobierno se esforzaba en presentarse como «business friendly» y, más allá del eslogan, poco o nada queda de sus intenciones. Después, recordemos, el president se lió la manta a la cabeza y la independencia desplazó cualquier otro intento de gobernar Cataluña. El mundo empresarial, salvo algunas excepciones, optó por apartarse a la espera de que se sucedieran los acontecimientos. De algún modo, firmaron una especie de armisticio. Por mucho que se esfuercen en negarlo, el proceso independentista ha tenido consecuencias, no tanto para las grandes multinacionales, cuyo volumen les permite sobreponerse, pero para las pequeñas y medianas empresas los últimos dos años de crisis sumado al vaivén político no han sido tan fáciles. Han pasado las elecciones y, por arte de magia, han comenzado ha surgir voces desde el mundo empresarial invocando una misma idea: estabilidad. La prórroga se ha acabado y si Mas no es imprescindible para el «procés», quizá tampoco lo sea ya para el empresariado.

Sólo así se explica que en un mismo día dos patronales catalanas y dos empresarios de renombre se hayan sacudido las ataduras para hablar con claridad. Uno de ellos, el president de Freixenet, Josep Lluís Bonet, es un habitual en las críticas a la Generalitat. En los últimos tiempos se ha erigido como una de las voces más críticas del empresariado catalán contra el «procés». En las patronales, en cambio, la cosa sorprende. No en vano, las dos patronales en cuestión son bastante próximas a la Generalitat.

Pimec, sin ir más lejos, apeló ayer «a la responsabilidad» de todos los grupos parlamentarios, a los que pide «anteponer los intereses de país por encima de los de partido», para la formación de un Govern estable con «la máxima celeridad posible». La patronal pide que los partidos busquen «fórmulas de diálogo y compromiso» en estos «momentos tan particulares para Cataluña». Sobre Mas, sin embargo, ni una palabra. «Los procesos electorales no son una preocupación para los empresarios, si durante y después del proceso electoral se continúa gobernando», añade la patronal en una crítica poco velada. Y por si eso fuera poco exigen un Govern con «sensibilidad empresarial». La otra patronal, Cecot, se mostró más comedida e insiste en que sigue siendo necesaria una consulta para clarificar qué tipo de relación se quiere entre Cataluña y España. No obstante quieren que se cree un nuevo Ejecutivo «estable o con acuerdos con los partidos para salvar la competitividad del país».

Mientras, el presidente de Hotusa, Amancio López, incidió también en que las empresas necesitan por encima de todo «estabilidad política» y seguridad jurídica y alertó contra los movimientos populistas, a la vez que aseguró que estamos en un momento de «gran preocupación».

Fomento del Trabajo, por su parte, se pronunció el lunes al restpecto. La patronal celebró el elevado niivel de participación, en las elecciones y felicitó a «las listas ganadoras, que tendrán preferencia para formar un nuevo Govern». No obstantey les pidió que prioricen «la consolidación de la recuperación económica y empresarial».