Interior

Los mossos incorporan las pístolas Taser al servicio en Girona

Se trata de una prueba piloto, que irá llegando al resto de regiones policiales del cuerpo

En la imagen, una patrulla de los Mossos en el río Ter, precisamente en la ciudad en la que se realiza la prueba piloto, con las Taser, Girona
En la imagen, una patrulla de los Mossos en el río Ter, precisamente en la ciudad en la que se realiza la prueba piloto, con las Taser, Gironalarazon

Se trata de una prueba piloto, que irá llegando al resto de regiones policiales del cuerpo.

Los Mossos d’Esquadra iniciaron en diversas comisarías de Girona, Figueres y Blanes una prueba piloto, que consiste en el uso de las pistolas eléctricas, denominadas Taser. Se trata de un arma que utilizan otros cuerpos europeos, pero que sin embargo es pionero en España.

El protocolo que acompaña al uso de esta pistola es el uso de una cámara de grabación oculta en el chaleco, además de la presencia de un desfibrilador para reaccionar ante posibles inconvenientes médicos.

El director general de los Mossos, Andreu Martínez, señaló que espera que con estas medidas el cuerpo dé «un salto cualitativo», en lo referente a seguridad ciudadana. «Nos estamos situando en lo que es una práctica policial ordinaria, de países democráticos y avanzados», apuntó.

La iniciativa fue bienvenida desde el cuerpo. Por ejemplo, el sindicato SME mostró su satisfacción por la incorporación de este tipo de pistolas. Un comunicado suyo reza que «es un paso importante para ser una policía moderna con medios efectivos». No obstante, lamentaron que «ha costado demasiado tiempo que llegara este día».

Rapidez

Lo que exige o desea el cuerpo es que las Taser se distribuyan lo más rápido posible a todas las comisarías de Cataluña, y consideraron que tener una sola por comisaría es «insuficiente», por lo que reclamaron una pistola eléctrica por cada patrulla, siguiendo la máxima «un policía, un chaleco; dos policías una Taser». Falta por ver la respuesta de la conselleria de Interior.

La pistola Taser dispara proyectiles que administran una descarga eléctrica a través de un cable. Su uso está autorizado generalmente en niveles de amenaza muy inferiores al que requiere la utilización de armas de fuego. No obstante, siempre ha recibido críticas, como por ejemplo por parte de organizaciones de derechos humanos.

El uso de las Taser se implantará de forma progresiva en el resto de regiones policiales, y su utilización se hará junto a la citada cámara personal, que grabará la actuación de los agentes.

Según Martínez, la pistola eléctrica es un dispositivo más en la intervención policial, y que tiene «carácter proporcional, congruente y adecuado a cada situación». Añadió que han llevado a cabo «un análisis interno muy exhaustivo en más de cuatro años de trabajo».

Por su parte, el portavoz de los Mossos, Albert Oliva, reiteró que se tiene que usar «para situaciones excepcionales». Remarcó que este tipo de arma cumple con tres objetivos, que a su juicio son «reducir el tiempo de la inmovilización de la persona, facilitar un uso mínimo de la fuerza indispensable en la actuación policial, y reducir el sufrimiento la persona que la recibe y de los agentes que hacen la intervención». Argumentó que los cuerpos policiales «están obligados a adecuarse a lo que les pide la sociedad, es decir, respuestas rápidas, efectivas y proporcionales».