Política

Comunitat Valenciana

La carencia de nuevas obras hidráulicas apuntala el estrés hídrico en el territorio valenciano

En la última década la Comunitat ha recibido el 5,83 por ciento de las inversiones del Gobierno central

La Cámara de Contratistas afirma que es necesario realizar 14 obras de conducción hasta 2021 que suman 434 millones de euros
La Cámara de Contratistas afirma que es necesario realizar 14 obras de conducción hasta 2021 que suman 434 millones de euroslarazon

La Comunitat Valenciana está en situación permanente de «estrés hídrico». Los acuíferos están sobreexplotados, los ríos secos, hay problemas de intrusión salina, contaminación y eutrofización del agua. El último informe semanal sobre el estado de los embalses confirma que el estado de las cuencas del Júcar y del Segura es mucho peor que el del resto. Los del Júcar están al 41 por ciento de su capacidad (1375 hectómetros cúbicos) y los del Segura al 32 por ciento (369 hectómetros cúbicos), mientras que la media de todos los embalses se sitúa en el 60 por ciento.

Sin embargo, todos estos factores, invariables en las últimas décadas, no han tenido consecuencias directas en las inversiones en obras hidráulicas. Como ocurre en el resto de infraestructuras, el Gobierno central se ha olvidado de la Comunitat Valenciana y en el reparto de inversiones en esta materia realizada de 2010 a 2018 le han correspondido 247 millones, cifra que equivale al 5,83 por ciento del total de la tarta nacional.

La Cámara de Contratistas de la Comunitat Valenciana vuelve a poner el acento en la marginación a la que se somete al territorio valenciano y exige un mayor interés por este tipo de infraestructuras.

Según los estudios realizados por varias consultoras y avalados por la patronal de las constructoras y concesionarias, Seopan, la inversión en infraestructuras en materia hídrica en el territorio valencian dería sumar 1.500 millones hasta 2021.

El grueso de esta cantidad iría a parar a 14 obras de conducción (434 millones), seguida de actuaciones para mejorar el riego (327 millones) y de 16 infraestructuras de ingeniería fluvial (318 millones). También se exigen obras en depuración (138 millones), desalación (25 millones), nuevas presas (122 millones), estaciones de bombeos 53 y abastecimientos (15 millones).

La Cámara de Contratistas admite que la cifra puede ser inabarcable para la Administración Pública por lo que insta al Gobierno a dotar de las suficientes garantías a las empresas privadas para que entren en este tipo de actuaciones.

Competencia, obras públicas

Ante la próxima constitución del Gobierno central y la esperada conformación del Consell, esta entidad solicita que las competencias en la construcción de este tipo de obras recaiga de nuevo en los Departamentos de obras públicas e infraestructuras. Rechazan, por tanto, que vayan vinculadas a los de Medio Ambiente ya que consideran que se ha demostrado que el agua no se trata como una prioridad.