Literatura

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Doña Sanchica de la Mancha

El Teatro Español da voz a las mujeres protagonistas del Ingenioso Hidalgo en «Quijote. Femenino. Plural»

Las «juglaresas» Lidia Navarro y Ainhoa Amestoy son Teresa Panza y su hija Sanchica
Las «juglaresas» Lidia Navarro y Ainhoa Amestoy son Teresa Panza y su hija Sanchicalarazon

El Teatro Español da voz a las mujeres protagonistas del Ingenioso Hidalgo en «Quijote. Femenino. Plural»

Las penurias de Sancho Panza en pos de Don Quijote de la Mancha son bien conocidas. Sin embargo, poco se sabe de la labor que la hija del escudero del Ingenioso Hidalgo realizó para evitar que los líos en los que se metían su padre y su señor fuesen mucho peores. Las cuitas de Teresa Panza respecto a las enloquecidas aventuras de su marido con Alonso Quijano son el original punto de partida de la obra de «Quijote. Femenino. Plural», que se estrena hoy en la sala Margarita Xirgú del Teatro Español y se podrá disfrutar hasta el próximo 1 de mayo.

La desconfianza esposa de Sancho le impulsan a enviar tras ellos a su hija Sanchica, que no sólo le cuenta los líos en los que se meten sino que, además, contribuye a evitar que sean más graves desde un discreto segundo plano. La joven irá y vendrá por los caminos aquejada de unas inmensas dudas sobre su propio mundo interior. El problema que le atormenta mayormente es el amor. Sanchica muestra especial inclinación por Lope Tocho, un mozo «rollizo y sano» del lugar, según Cervantes, mientras que su padre quiere convertirla en princesa de la Ínsula Barataria, lo que le obligaría a buscar un matrimonio de más alta alcurnia. Durante este viaje, la joven descubre a su vez historias, recomendaciones y advertencias de todas las mujeres con las que se cruce.

Bajo la dirección de Pedro Villora, Lidia Navarro y Ainhoa Amestoy protagonizan este recorrido femenino por la obra cumbre de Miguel de Cervantes. Un texto optimista que canta a la libertad a través de la voz de «dos juglaresas del siglo XXI», que con su fuerza y solidaridad aportan una perspectiva moderna, desde el respecto a la tradición, de la historia inmortal de Don Quijote de la Mancha. Para combinar la tradición cervantina con la perspectiva contemporánea, Villora acompaña la representación con música e iluminación que reflejan los distintos estados de ánimo de las protagonistas. Y sobre las tablas estarán también unas de las últimas creaciones del fallecido escenógrafo Andrea D’Odorico que ideó unas muñecas que representan a los diversos personajes como Luscinda, Marcela, Maritornes, Quiteria y otras emblemáticas féminas de la novela (también Dulcinea: en sueños monologará un pasaje escrito por Fanny Rubio), que acompañan el peregrinaje de Sanchica.

Se trata además de una pieza que se estrena con motivo del IV Centenario de la muerte del escritor y que llega a Madrid después de pasar por el Festival de Teatro Clásico de Almagro, por Nueva York, algunas sedes del Instituto Cervantes y la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid y que continuará su trayectoria en los próximos meses en espacios como la Universidad Menéndez Pelayo de Santander o el Festival de Teatro Clásico de Chinchilla. A nivel internacional, está previsto que la obra viaje ultramar gracias a la colaboración de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el Ministerio de Cultura.