Festivales de Música

El Langui obligó a Ahora Madrid a mover su caseta

Ahora Madrid presumió en su cuenta de Twitter de que su caseta estaba en primera línea de los conciertos de la pradera
Ahora Madrid presumió en su cuenta de Twitter de que su caseta estaba en primera línea de los conciertos de la praderalarazon

Después de conseguir que los autobuses interurbanos se adapten a todo tipo de sillas de ruedas, al paralizar como protesta en dos ocasiones el paso de los vehículos, El Langui volvió el pasado sábado a demostrar que no se conforma con nada que no esté bien hecho. Esta vez quienes tuvieron que, a todo correr, adaptar la situación a lo que exigía el artista fueron los responsables de la caseta de Ahora Madrid en las fiestas de San Isidro, en Carabanchel.

El pasado sábado, El Langui era el artista estelar del cartel de conciertos en la pradera y, como todo buen artista, estuvo probando horas antes el escenario, el sonido y la iluminación. Para sorpresa de todos, una vez terminado el ensayo, el cantante y actor se plantó en su camerino y dijo que no salía a actuar hasta que moviesen la caseta más cercana al escenario, que era la de Ahora Madrid.

Al pie del escenario

Al parecer, para que el sonido reverbere adecuadamente, no puede haber nada más cerca de 45 metros de los altavoces, aproximadamente la distancia a la que se suele colocar el centro de control del sonido y las luces. Sin embargo, según denunciaron desde el PP de Carabanchel, a la hora de instalar las casetas, el equipo de Gobierno de Ahora Madrid había deshecho los planes anteriores de la feria, que sí tenían en cuenta la distancia apropiada, y se habían colocado a apenas 20 metros del escenario. Es más, presumían de ello en las redes sociales.

Debido al plantón de El Langui y con el entorno del escenario llenándose cada vez más para ver actuar a los otros grupos que completaban el cartel, los responsables de la caseta optaron por acordonar todo el entorno y desplazar, a pulso, toda la parafernalia. «Movieron las carpas, neveras, cocina y las mesas y las sillas que habían puesto en medio y que El Langui dijo que tampoco quería entre él y el público», explicaron desde una caseta cercana. Asimismo, desde el PP de Carabanchel reclamaron que para poder apartar a los asistentes al concierto de la caseta de Ahora Madrid –que incluso después de haberse separado del escenario se mantenía mucho más avanzaba que el resto de las instaladas por los grupos políticos– habían utilizado unas vallas antipánico del Ayuntamiento de Madrid que habían retirado de otra zona de la pradera.

Finalmente, el concierto de El Langui se pudo desarrollar con normalidad y Ahora Madrid mantuvo sus vistas «privilegiadas» desde la primera línea, aunque fuese veinte metros más lejos que su ubicación original, y de ello presumieron en las redes sociales.