Alcalá de Henares

La mujer que mató a su hijo afirma que sufrió una violación

El feto estaba vivo antes de recibir doce puñaladas con unas tijeras, que le provocaron heridas en órganos vitales como el corazón y el pulmón.

Imagen del juicio contra una acusada de matar a su bebé recién nacido en Madrid
Imagen del juicio contra una acusada de matar a su bebé recién nacido en MadridEpLa Razón

Hace ya dos años, el 20 de febrero de 2018, una joven mató a su recién nacido en Alcalá de Henares. Durante el juicio que se ha llevado a cabo hoy, especialistas en patología forense han expuesto que el bebé estaba vivo antes de que este sufriera diversas puñaladas con unas tijeras que le provocaron una docena de heridas, varias de las cuales penetraron en órganos vitales como el corazón.

El juicio contra Sonia. B. A. finalizará el próximo miércoles con los informes finales en los que se espera que la fiscal rebaje la pena previsiblemente al aplicarle una eximente incompleta, una atenuante que fue solicitada por la defensa por el trastorno mental que sufrió la madre en el momento de los hechos.

Varios psicólogos han reafirmado que la joven sufre una depresión grave, que es compatible con un trastorno con características psicóticas y amnesia disociativa. Asimismo, según el relato que le habría manifestado la mujer a estos especialistas, es que sufrió una violación.

La acusada fue violada una noche a la salida del bar en el que trabajaba, un suceso con el que explicó su embarazo que desconocía su entorno hasta el hallazgo del cadáver. Según la acusada, un cliente del bar la siguió hasta un túnel y la agredió sexualmente, han señalado hoy en el juicio en la Audiencia de Madrid las forenses que se entrevistaron con Sonia B.A., acusada de asesinato por el que se enfrenta a una petición fiscal de 22 años de cárcel.

A pesar de este relato, dudaron de su testimonio sobre “un hecho que no consta en ningún informe”, según han declarado las forenses en calidad de peritos, antes de precisar que no hay ninguna prueba para dar credibilidad a una declaración en mitad de un trastorno psicótico en el que perdió “la noción de la realidad”.

Del mismo modo, una forense explicó durante la semana pasada, que pudo sufrir un trastorno de negación del embarazo y como consecuencia se puede dar el neonaticidio en las primeras 24 horas. “Quiero morir, culpable de la vida que llevo y si no me muero, la mato”, trataron de ilustrar en boca de la joven. Los forenses han recomendado que la joven interne en un centro psiquiátrico penitenciario para que pueda continuar con un tratamiento psicoterapéutico para su patología mental.

Dos especialistas en patología forense también han comparecido en la práctica de la prueba pericial que estudiaron las heridas que presentaba el feto y el objeto que las causó. Explicaron que el cuerpo tenía doce heridas de entre 12 y 15 centímetros, varias de ellas en órganos vitales como el corazón y el pulmón; y que según las características de las heridas, muchas en paralelo, hacen pensar que pudo usar unas tijeras cerradas o abiertas, así como un objeto cortante con hoja de 18 centímetros.

Asimismo, una especialista en patología forense ha determinado que el feto estaba vivo antes de las puñaladas debido a las características vitales que presentaban el corazón y el pulmón.