Sucesos

Se fuga un preso de Valdemoro aprovechando una visita al Thyssen

Tiene 35 años y cumplía condena en un módulo de respeto de la prisión madrileña

En la imagen, fachada del Museo Thyssen-Bornemisza, en el Paseo del Prado
En la imagen, fachada del Museo Thyssen-Bornemisza, en el Paseo del Pradolarazon

Los hechos ocurrieron el pasado día 28 de abril. Un grupo de seis presos que cumplen pena en Valdemoro fueron autorizados por la dirección de la prisión para visitar el museo nacional Thyssen-Bornemisza. El grupo de internos se desplazó en autobús hasta la capital. Y, justo antes de iniciar la visita, algunos entraron al servicio. Cuando salieron, faltaba uno de sus compañeros. Se había fugado.

Así lo ha denunciado la Agrupación de Cuerpos de Administración Penitenciaria. Según detallan, el preso evadido tiene 35 años de edad, es de complexión fuerte y bajo de estatura, y cumplía condena en un módulo de respeto del centro penitenciario. Estaba clasificado en segundo grado de tratamiento, y todavía le quedaba bastante tiempo para cumplir su condena.

Al cargo de los internos, señalan, iban dos terapeutas pertenecientes a una ONG, que nada pudieron hacer para evitar la fuga del preso. Y es que, según relataron otros internos, había salido corriendo. Como consecuencia, los terapeutas suspendieron la visita al Museo y volvieron al centro penitenciario con el resto de los internos.

El interno cumplía condena en uno de los mejores módulos del centro y trabajaba en los talleres, un puesto que desean la mayoría de los presos, y al que sólo acceden los que tienen buen comportamiento, dado que en la prisión no hay trabajo para todos. La Agrupación recuerda que es la segunda vez que se produce una fuga de estas características. La última, en 2012, cuando se fugaron dos presos en una visita al Templo de Debod. En aquella ocasión, uno de ellos murió atropellado en su fuga cuando pretendía cruzar a pie la M-50.

La fuga, afirman desde la Agrupación de Cuerpos de Administración Penitenciaria, se produce en un momento “convulso” en el centro penitenciario donde “los sindicatos hemos pedido la dimisión y cese del director, por la criminalización a la que está sometiendo a la plantilla y la prisión provisional injusta que han sufrido cuatro compañeros”.

Con esto último, se refieren a la detención, en mayo de 2021, de cuatro funcionarios de la prisión en sus respectivos domicilios, acusados de introducir móviles y droga en la prisión madrileña. Una denuncia que partió del director del centro, qu fue quien puso sobre aviso a la Guardia Civil. El pasado 22 de marzo se decretó el sobreseimiento de las diligencias abiertas contra ellos por los delitos de banda organizada, contra la salud pública, cohecho, prevaricación y omisión del deber de impedir delitos. “Ni siquiera había constancia de que se cometieran esos delitos en la prisión de Valdemoro”, señalan. El resultado, unos trabajadores “que han cumplido cuatro meses de prisión injusta”. Por ello, denuncian que la prisión “no anunciara con orgullo y dignidad su inocencia”.

Además, añaden, la propia dirección, a su vez, ha pedido el cese o dimisión del subdirector de Tratamiento. Posiblemente, afirman los funcionarios, la fuga ahora conocida “sea utilizada para forzar su marcha. Este cese o dimisión sería el quinto subdirector de tratamiento penitenciario que dimite o directamente le cesa la dirección del centro en los últimos años”, concluyen.