Estado de la Región

Ayuso exhibe mayoría absoluta y pide a Sánchez que no estorbe

Ayuso devolvió en la Asamblea los dardos del presidente del Gobierno en el comienzo del curso político

Debate sobre el estado de la región @Gonzalo Pérez Mata
Debate sobre el estado de la región @Gonzalo Pérez Mata Gonzalo Pérez Mata Fotógrafos

En su primera cita parlamentaria tras el verano, Isabel Díaz Ayuso ha sacado pecho. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha exhibido su mayoría absoluta y ha presentado una batería de medidas para consolidar el liderazgo de la región. En plena ofensiva del Gobierno contra Madrid, la popular aplicará nuevas rebajas fiscales. Pedro Sánchez arrancó el curso lanzando sus dardos contra la madrileña y ésta se la ha devuelto en la Asamblea.

En su primer Debate sobre el Estado de la Región con mayoría absoluta, la presidenta ha centrado su discurso en demostrar las ventajas de sus políticas en detrimento de las de la izquierda y ha revelado su plan para frenar un posible avance de Hacienda en Madrid. En pleno debate sobre la financiación, Ayuso ha culminado su desafío al presidente del Gobierno avisando de que «Madrid no pagará los privilegios a Cataluña». La advertencia venía precedida de la admisión a trámite del recurso contra Sánchez por no convocar la Conferencia de Presidentes y la formalización del recurso contra la Ley de Amnistía.

El curso ha comenzado en Madrid para más de un millón de alumnos y la presidenta le ha puesto deberes a su Gobierno. Casi un centenar de medidas. Entre ellas, un paquete fiscal para consolidar a la región como la que baja más impuestos. Pese al escaso margen que le queda a la Comunidad para seguir aplicando recortes fiscales, elevará ya desde el año próximo la bonificación al 50 por ciento para las operaciones entre hermanos y entre tíos y sobrinos por consanguinidad. En la actualidad se encuentra en el 25 por ciento.

Además, bonificará al cien por cien el impuesto de Sucesiones y Donaciones para las donaciones esporádicas entre particulares inferiores a mil euros.

El presidente del Gobierno puso a Ayuso en el foco a escasos días del Debate sobre el Estado de la Región y diluyó unas horas la atención sobre la financiación de Cataluña. Su amenaza de más impuestos para los «ricos» madrileños avanzaba el enésimo choque con la dirigente y ésta no ha defraudado. «Antes se romperá la Cataluña independentista, que las izquierdas rompan España y rompan Madrid», advirtió tras acusar al jefe del Ejecutivo de «construir una dictadura» ante los ojos de todos, una vez que aseguró que gobernará con o sin Parlamento.

Moncloa puso a Ayuso de parapeto para minimizar los daños causados por su gestión, la contestación interna en el PSOE, la debilidad de los pactos con sus socios, los casos en los tribunales, el concierto…Y la presidenta aumentó la difusión del desconcierto. Avisó: Sánchez intentará «quitarnos nuestra autonomía y nuestras competencias para subirles los impuestos a los autónomos, comerciantes y a todos aquellos que hacen verdaderos esfuerzos fiscales» y concluyó: «Estamos en un punto en el que ya apenas pedimos nada al Gobierno de la nación. Sencillamente, que deje de estorbar y pague lo que le corresponde por cada madrileño, que está infrafinanciado por cabeza».

En la segunda jornada del Debate, Ayuso insistió en el que muchos en su partido consideran ya un nuevo «grito de guerra»: que nos deje en paz. Frente a la «madrileñofobia», un «no estorbes»; contra los «ataques», un «no molestes», mensajes cortos para acompañar la implacable crítica de la presidenta a la «parálisis» del Gobierno. Tras describir una suerte de boicot del Ejecutivo a gran parte de su gestión, un torpedeo a muchas de sus iniciativas y la utilización de las instituciones para «atacar a la Comunidad de Madrid», afeó al secretario general de los socialistas madrileños, Juan Lobato, su cuestionamiento de las prioridades de su Gobierno frente a las políticas de Sánchez.

Lobato ha centrado su discurso político en criticar la falta de enfoque de la Administración de Ayuso hacia áreas cruciales como la ciencia, la innovación y el emprendimiento y ha propuesto una deducción fiscal del 40 por ciento en gastos relacionados con tratamientos de enfermedades mentales. Además, ha defendido colegios hasta los 18 años con profesores mejor pagados después de que la presidenta hiciera otro de sus anuncios estrella referidos a la Educación: jornada partida en los colegios.

No ha dejado pasar la ocasión el portavoz del grupo popular, Carlos Díaz-Pache, para constatar la presencia en la sede de Vallecas del delegado del Gobierno, Francisco Martín, considerado rival de Lobato en su carrera por mantener el liderazgo en su partido. Martín ha forzado esta semana la penúltima polémica con la Comunidad y el Ayuntamiento a cuenta de la «okupación». Consciente del valor que para Ferraz tienen sus polémicas con Ayuso y Almeida, el delegado ha colocado el altavoz al lado de los anuncios de los populares en relación con la vivienda. La «okupación» es para Martín sólo una cortina de humo utilizada por la derecha para alarmar.

El afán de protagonismo del «aspirante» socialista duró poco. Horas después, la presidenta de la Comunidad reveló el plan de su Gabinete para ampliar desde los 35 a los 40 años la edad para deducir el alquiler de vivienda habitual en el IRPF o la construcción de otras 2.000 nuevas viviendas a precio asequible para jóvenes de hasta 35 años, entre otras. La vivienda estuvo también en el centro de las críticas de la portavoz de Más Madrid, Manuela Bergerot, que lanzó duras acusaciones contra Ayuso al considerar que está abandonando los servicios públicos en favor de la privatización.

La bronca alcanzó el máximo de decibelios a cuenta del centro de atención a hombres víctimas de violencia sexual y la recuperación de la Dirección General de la Mujer, anunciada por la popular.