Suceso

Brutal agresión en Carabanchel: mujer lucha por su vida tras violento ataque de su inquilino

La Policía Nacional le detuvo allí mismo y auxilió a la víctima, que permanece ingresada en el 12 de Octubre

Agentes de la Policía Nacional
Agentes de la Policía NacionalArchivo

En un hecho de extrema violencia ocurrido en el barrio de la Peseta, distrito de Carabanchel, una mujer identificada como María, de 50 años, lucha por su vida después de ser brutalmente agredida por su inquilino, Jesús L. M., de 49 años. La agresión, que ocurrió el martes 20 de febrero alrededor de las 9:00 a.m., dejó a María con la cabeza desfigurada y múltiples lesiones.

Según los informes, Jesús L. M. marcó el teléfono de un amigo minutos después del ataque para relatar lo sucedido. La rápida respuesta de este amigo condujo a la escena del crimen, ubicada en la calle del Arte Rupestre del Mediterráneo, 4. Al llegar, se encontró con María semiinconsciente y gravemente herida en la puerta de su habitación.

Los hechos que ocasionaron el suceso

La Policía Nacional recibió la llamada de emergencia alrededor de las 9:23 a.m., y dos patrullas llegaron al lugar en siete minutos. Los agentes encontraron a María con evidentes golpes en la sien, el cuello y la clavícula. La intervención rápida de los agentes y la solicitud de asistencia médica permitieron que María fuera estabilizada y trasladada al hospital 12 de Octubre. A pesar de sus múltiples lesiones, su vida no corre peligro.

Jesús L. M. fue detenido en el lugar de los hechos y confesó ser el autor de la brutal agresión. Según su relato, la agresión fue precedida por una fuerte discusión en la que María le amenazó con llamar al 016 para quitarle la custodia de su hija menor. Aunque no tenían una relación afectiva, Jesús alega que María le insultó llamándolo "maltratador".

La Policía ya está investigando el caso

La versión de Jesús sobre la amenaza con un cuchillo por parte de María no convenció a los agentes. Además, los vecinos del bloque sugieren que María tenía antecedentes problemáticos y que presuntamente había estafado a varios residentes haciéndose pasar por abogada. Se estima que habría obtenido ilegalmente alrededor de 50.000 euros.

La Policía Científica y el Grupo VI de Homicidios están llevando a cabo la investigación para esclarecer los motivos detrás de la brutal agresión y por qué la cerradura del bajo estaba destrozada la mañana del ataque. María enfrenta una reclamación judicial por un delito de intrusismo, y Jesús, conductor de autobuses de baja por problemas psiquiátricos, ha sido puesto a disposición judicial.