Sociedad

Cumbre del Clima de Madrid

Cumbre del Clima de Madrid: una prórroga por el desacuerdo en financiación y el mercado de carbono

Barajan la posibilidad de crear un marco general para el artículo 6 separado de la parte técnica, debido a las discrepancias que imposibilitan llegar a un acuerdo por la postura de Brasil, EE UU y Australia. Y dejar así los «escollos» para la COP de Glasgow

Duodécima y última jornada de la Cumbre del Clima (COP25) en Madrid
El coordinador de la Presidencia de la COP25, Andrés Landerretche (c), ofrece una rueda de prensa durante el último día de la Cumbre del Clima (COP25) celebrada en MadridRicardo RubioEuropa Press

Poco margen para la esperanza. La Cumbre del Clima tendría que haber terminado hoy, y lo cierto es que no parece que vaya a ser así. Sigue habiendo los mismos problemas encallados que había inicio. El principal, el artículo 6 del Acuerdo de París, que rige los mercados de carbono. «Unos asuntos están más avanzados que otros, como la agenda de género. Respecto al artículo 6, existe la posibilidad de fijar un marco general separado de las cuestiones técnicas», afirmó Andrés Landerretche, coordinador de la presidencia de la COP. Como explicó barajan la posibilidad de crear un grupo de trabajo para la parte técnica que pueda avanzar en la letra pequeña de aquí a Glasgow (2020).

Y es que sigue habiendo dos posturas enfrentadas sin visos de alcanzar un acuerdo. En juego está el dinero. Lo dijo bien claro uno de los ministros de Costa Rica en la presentación de la postura de los estados que forman parte de la Coalición de Ambición Elevada: «Muchos de los textos que hay hasta la fecha son incompatibles con el Acuerdo de París», en referencia a la postura que mantienen «Brasil, Australia y EE UU, que quieren una doble contabilidad y que continúen los mismos mecanismos que en el Protocolo de Kioto»; lo que provocaría que los mercados se llenaran de créditos, haciendo bajar aún más el precio de la tonelada de CO2. Además, permitir que hubiera una doble contabilidad (que comprador y vendedor cuenten una misma reducción), pondría en jaque el sistema.

«La postura de Costa Rica es que muchos de los aspectos hasta la fecha son inadmisibles. Hay unas líneas rojas muy claras para nosotros (las descritas). Eso no es negociable. No nos vamos a mover de ahí», añadió.

Opinión que comparte Laurence Tubiana, ex asesora del gobierno francés para el Acuerdo de París y directora de la Fundación Europea por el Clima: «El problema es que estos tres países querían unos mercados de carbono que les permitiera no hacer nada. Y esto no es posible. Hay que decir ‘‘no’’ en algún momento». En cuanto a se está detectando regresión en la ambición, dijo tajante que «no», lo que sucede es que «todo el mundo espera lo que va a pasar en las elecciones norteamericanas. China, por ejemplo, se está planteando a dónde va a causa de los factores económicos exteriores. Todo el mundo espera a ver que succede en 2020. Lo que tiene que ocurrir aquí es que los países se pongan serios sobre el mercado de carbón porque, de lo contrario, existe el riesgo de crear un agujero por donde puede caerse todo el Acuerdo de París» que arranca en 2020. «Es mejor que un asunto lleve un poco más de tiempo –prosigue–que aprobar algo que no es sólido. Que quede claro que no vamos a comprar créditos que no valen».

Otro frente es la falta de ambición mostrada por India y Japón, que no están por la labor de presentar sus respectivos planes nacionales al alza en 2020.

«Ningún país está yendo en la dirección correcta», sentenció una representante de las Islas Marshall, que añadió que «lo afirmado por la ciencia no es negociable». Etiopía resumió en una frase el sentir de muchos: «Esperamos que haya un acuerdo, pero para tener un acuerdo malo, mejor no tener acuerdo». Algo que contrasta con la posibilidad que se baraja del artículo 6. A ello se suma que, como explicó Landerretche, «algunos países han preguntado –en las las últimas horas– por más financiación para sus planes de mitigación y adaptación». No será fácil llegar a un acuerdo, de ahí que él tenga «un optimismo moderado», aunque aseguró que «no vamos a salir de Ifema sin un buen resultado».