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Estudio

Reducir desperdicio de alimentos podría no tener el impacto esperado en el medio ambiente

El estudio de la Universidad de Colorado en Boulder (Estados Unidos) plantea una nueva perspectiva sobre la reducción del desperdicio de alimentos y sus beneficios medioambientales.

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Dieta verduras comidaFreepik

Aunque durante años se ha promovido la eliminación de la pérdida y el desperdicio de alimentos como una medida clave para reducir el impacto ambiental del sistema alimentario, el estudio sugiere que sus beneficios podrían no ser tan significativos como se esperaba.

La investigación, publicada en la revista 'Nature Food', revela que si bien reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos puede tener un impacto positivo en la seguridad alimentaria al aumentar la disponibilidad de alimentos y reducir los precios, no tendría el mismo efecto en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero que se creía.

Hasta el momento, la pérdida y el desperdicio de alimentos a lo largo de la cadena de suministro representan hasta el 24% de las emisiones de gases de efecto invernadero del sistema alimentario mundial y el 6% de las emisiones totales en todo el mundo. Sin embargo, el nuevo estudio sugiere que la reducción total de la pérdida y el desperdicio de alimentos solo disminuiría entre 1/2 y 2/3 de los beneficios medioambientales previstos.

El análisis tomó en cuenta las repercusiones de reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos, teniendo en cuenta las directrices de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. El equipo de investigación utilizó un modelo sencillo para analizar las respuestas de la oferta y la demanda ante esta reducción. Los resultados indican que la disminución de los precios de los alimentos provocaría un aumento en el consumo, lo que compensaría algunos de los beneficios medioambientales esperados.

Los expertos señalan que, si bien la reducción del desperdicio y la pérdida de alimentos podría no tener el mismo impacto ambiental esperado, es crucial reconocer sus beneficios para la seguridad alimentaria. Además, hacen hincapié en la necesidad de considerar soluciones específicas para cada región, tipo de alimento y necesidades dietéticas.