Motor

¿Cómo puedo ahorrar carburante en mis viajes de verano?

Acelerar gradualmente y frenar suavemente puede mejorar el ahorro de combustible hasta entre un 15 % y un 30 % en carretera

Carretera española la pasada semana
Carretera española la pasada semana Europa Press

Según los datos oficiales, durante los meses de verano se producen en España 53 millones de desplazamientos en automóvil, lo que supone un enorme consumo de carburantes y, como consecuencia de ello, un desembolso importante de dinero para las economías familiares. Pero ciertas formas del uso del automóvil nos pueden ayudar a reducir el consumo y, como consecuencia de ello, la factura en la gasolinera.

Para este último fin, es decir, el de reducir el volumen de los pagos de gasolina y diésel, lo primero sería observar los precios de cada producto en las gasolineras. Porque no todas las estaciones de servicio son iguales y tienen las mismas tarifas. Por ejemplo, hemos visto en los últimos tiempos la publicidad del piloto Carlos Sainz promocionando a la marca Plenergy, que opera a precios competitivos en España y Portugal.

Otro consejo para ahorrar combustible es evitar frenazos innecesarios. Acelerar gradualmente y frenar suavemente puede mejorar el ahorro de combustible hasta entre un 15 % y un 30 % en carretera y entre un 10 % y un 40 % en ciudad, según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA). Cada vez que se frena bruscamente, se desperdicia la energía generada por el motor. Es importante observar el comportamiento de los vehículos que van por delante, frenar, levantar el pie del acelerador con antelación y aprovechar la inercia siempre que sea posible.

Es importante lógicamente mantener el vehículo en buen estado. Utilizar el aceite recomendado, controlar la presión de los neumáticos, cambiar los filtros de aire, limpiar las bujías y preservar la limpieza general del coche, favorece un funcionamiento más eficiente y un menor consumo de combustible. La acumulación de suciedad y polvo puede afectar el rendimiento del motor, por lo que mantener el vehículo limpio también es esencial. Por ello, si podemos, pararemos en estaciones de servicio que tengan máquinas de inflado de neumáticos y túneles de lavado.

Hay que tratar también de reducir la carga del vehículo, eliminando objetos innecesarios del maletero y del interior para aligerar el peso y mejorar la eficiencia del coche. Asimismo, limitar el uso de bacas o portaequipajes cuando no sean imprescindibles ayuda a reducir la resistencia al viento, especialmente a altas velocidades. También es importante mantener las ventanas cerradas en carretera, ya que abiertas generan mayor arrastre y, por tanto, un mayor gasto de combustible. Siempre que sea posible, es recomendable moderar el uso del aire acondicionado, ya que su uso intensivo afecta asimismo al consumo y al rendimiento del vehículo.

A mayores revoluciones del motor, mayor consumo. Por ello es recomendable conducir usando marchas largas siempre que sea posible, ya que mantener el motor a bajas revoluciones reduce el consumo. Cambiar de marcha de forma suave y a tiempo, evitando aceleraciones bruscas y revoluciones altas, ayuda a que el motor trabaje de manera más eficiente y a prolongar su vida útil.

Es importante, por último, planificar el viaje para buscar las gasolineras más baratas y usar aplicaciones de navegación, como la denominada “mis viajes”, para evitar el tráfico denso y así mantener una velocidad constante y disminuir el consumo.