Opinión

Yo, Leonor

Hoy estamos de cumpleaños. Altibajos hace cuarenta y siete. ¡Lo vamos a pasar de bien! Conociéndola, lo celebraremos cambiando las acelgas rehogadas y la caballa a la plancha por lombarda y japuta. Y, si hay suerte, un Trina a medias con mi hermana. Luego le voy a dar su regalo. Le he comprado unas gafas de esas que dan en las bolsas de cotillón que llevan una nariz incorporada. Pa que vea los escalones, mayormente. Y una cuerda gorda para que se sujete el genio, que lo saca siempre suelto y luego pasa que salimos en los papeles. Claro que, a estas alturas, no creo que a nadie le sorprenda la rabotá que le pegó al gorila. Que es lo que yo le he dicho a Altibajos: te estabas dando un baño de multitudes y no llevabas los ojos donde hay que llevarlos, mama. Llego a tropezar yo y el capón que me llevo es minino. Ella ya nos ha dicho que no es mujer de tomarse a mal cumplir años y que acepta el paso del tiempo divinamente y yo le he dicho que se le nota porque apenas se ha operado la cara. En ese momento ha pegado un portazo y yo creo que va a alquilar una mazmorra para encerrarme, cosa que prefiero antes de que me sigan llevando al colegio. ¿Hasta cuándo nos van a seguir llevando, por favor? Qué vergüenza, macho, si ya pesamos más que ella y mi So seguramente mida lo mismo. Pos nada, ahí, como dos tontas. Que se lo dije el otro día a nuestrohijoFelipe: un día me va a salir la borbona que llevo dentro y me voy a hacer más pellas que el yayo. Que, por cierto, con los arreglos que le han hecho, que tiemble la hostelería que vuelve en plena forma. En fin, me voy a ver si le soplo las velas antes de tiempo. Por cierto, voy con el gorila.