Miguel Ors

¡Tierra, trágatelos!

La Razón
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L18 Trágatelos

«Lo importante, Majestad, no es España. Lo importante, Majestad, soy yo, Pedro Sánchez». Si no así exactamente, así más o menos ha debido decírselo. Pedro Sánchez no lleva en la cabeza el Estado (lo que tan bien llevaba en su sesudo coco Fraga). Pero lo peor no es eso, lo peor es que tampoco lleva a España en la cabeza.

El «Estado» de Simeone es el Atlético de Madrid, y qué magníficamente lo gobierna con su cabeza. El Atlético, con el gobernador Simeone, es por méritos, majeza y poder, casi otro Barca, casi otro Real Madrid.

–A veces –me dice irónico Salvador Santos– el capital no lo es todo, a veces una cabeza con buena sesera puede al capital.

Algo así está ocurriendo con el Atlético de Simeone. Es el equipo menos goleado de la Liga y la «Champions». El vestuario es una piña de amistad. Nadie está contra nadie.

–En el Barça, todos están con Messi, mayormente Neymar y Suárez. En el Atlético, todos están con Simeone, mayormente... todos.

Así como la naturaleza imita al arte, ¿por qué no imitan a Simeone todos los Sánchez insolidarios y peligrosos y poco fiables de la Liga política?

–Y cuando hablan públicamente, qué falaces son invocando doctrinalmente la necesidad del «hermano» diálogo... sobre todo cuando se trata de «dialogar» con separatistas y demás ralea antisistema.

Tierra, ¿por qué no te los tragas?

M19 Enemigos

Los enemigos del alma, según me enseñaron los jesuitas en mis años de internado con ellos, son el mundo, el demonio y la carne. Luego, ya de señor mayor, amochilado y con coleta de licenciado, uno constató que los verdaderos enemigos del hombre son el dinero, el sexo y el poder.

–Enemigos, oiga, gozosos, que el sexo es un gozo, el dinero otro gozo y el poder el gozo que le permite a uno conquistar más fácilmente los otros dos gozos.

Es por eso, a lo mejor, por lo que Pedro Sánchez, a la menor ocasión, pone de parto al paciente y apacentador Rajoy; se nota que ve en el presidente en funciones el poder que endemoniadamente ansía él. «¡Rajoy –se desfoga, proclama, mitinea– vete, Rajoy déjame La Moncloa, Rajoy no es decente!»

Rossi es un poco, o bastante, como Pedro Sánchez. Se cree el mejor, rinde culto al poder de la fama, al poder del poder y al poder de su Moncloa, que es su moto GP. No olvida ni perdona todavía, especialmente a Márquez, a quien casi mata con su patadita, que Lorenzo le derrotase. Los «tramposos» como Rossi y Sánchez son así.

–Que Dios, también Lucifer, nos proteja de ellos.

Claro que sí.

X20 Nadal

Rafa Nadal no es el tenis español, pero el tenis español sin el vigor físico y mental (igual a éxito) de él es menos vigoroso. La eliminación de Nadal en el primer asalto del Open de Australia nos ha sentado a todos como un trompazo de KO. Nadal es mucho más que un tenista. Nadal nos une a todos por su simpatía, su ética, su españolidad, su elegancia humana y señorial. Si todos fuésemos como Nadal, España sería el país más hermoso y admirado del mundo. Nadal frisa los 30 años y el tiempo mengua todos los vigores. Nadal es uno de mis santones; su dolor también me duele. Creo en mis santones, creo por consiguiente en el milagro de un nuevo triunfo de Nadal en Roland Garros. Mi firme y ortodoxa fe.

J21 Gol

Seguí a la vez, en la televisión, el partido del Barça en Bilbao y del Atlético en Vigo. Conmigo, Hernán San Pedro. Dice resignado (es madridista):

–El Barça es fútbol geometría, con o sin «ellos» (en referencia al tridente). Creo que también esta temporada va a arrasar en las competiciones españolas.

Dice, acabado el duelo de Vigo:

–Hay que ver lo que cuesta hacerle un gol al Atlético y hay que ver lo que le cuesta al Atlético hacer un gol.

V22 Creced

«Creced y multiplicaos –dijo Dios–, y llenad la tierra y sometedla». Florentino Pérez, hay que repetirlo, es divino. Con él, esté donde esté, el dinero crece y crece y crece, como manda Dios. Crece ACS, su empresa; y el Real Madrid, gracias también a él, es el número uno del mundo en ingresos. Más que los equipos ingleses, más que los equipos franceses y más que los equipos de Merkel.

–¿También más que el Barça?

–También.

Pero como el dinero, con serlo casi todo, no lo es todo, el Barça multiplica sus títulos. Es su manera «asimétrica», que diría Pedro Sánchez, de joder al Real Madrid. Ciertamente, qué difícil es ser totalmente feliz.