Grupos

Politizar la acción de un perturbado

Daniel Pérez dijo que quería atentar contra todos los políticos porque «son iguales» para explicar por qué empotró su coche en la sede del PP con dos botellas de butano. A Podemos le faltó tiempo para instrumentalizar el suceso y hablar de que en España «hay mucha desesperación y mucho drama humano». Lo honesto y digno habría sido atenerse a la verdad y condenar el acto de un perturbado, pero algunos entienden que el fin justifica cualquier medio, incluso el de politizar el drama personal de un enajenado.