Sin Perdón

¿Sánchez puede remontar?

«A pesar de los esfuerzos de la izquierda mediática, Sánchez fue el mejor aliado de Feijóo»

Es posible que lo consiga en el metaverso que le han organizado en La Moncloa. No veo otra opción. He de reconocer que me gustaría saber por qué Sánchez tuvo una actuación tan desastrosa en el cara a cara celebrado en Atresmedia. Lo bueno del metaverso es que se puede vivir una realidad paralela. En este caso, el candidato socialista sale entre aclamaciones del plató de Atresmedia mientras Feijóo se derrumba. No solo eso, sino que se acerca, finalmente, para rendirle pleitesía y reconocer claramente que no hay mayor estadista en la Historia de España que el secretario general del PSOE. Sus colaboradores le aplauden mientras atraviesa el edificio hasta llegar a la calle donde se concentran los habitantes de San Sebastián de los Reyes para mostrarle su adhesión inquebrantable. Necesitan expresarle el orgullo que sintieron al verle vapulear dialécticamente a su rival. Lo único que no cambia de la realidad es la impresionante caravana de vehículos oficiales y escoltas, aunque la pueden ampliar para que se sienta más animado.

A gran velocidad recorre la autovía y la capital de España hasta llegar a la sede del PSOE. La calle Ferraz está bloqueada por las decenas de miles de madrileños que le esperan. Desde el balcón, como hubiera hecho Lenin, arenga a las masas para que acudan el 23-J y le otorguen una victoria histórica de 350 diputados. Nada más justo que un parlamento monocolor como tributo de los españoles a tan excelso prócer. Tras esta abstracción es bueno recordar lo que realmente sucedió. La llegada de Sánchez a Ferraz mostró quién había ganado. Unos cuantos fieles con camisetas rojas en un ejercicio de encomiable voluntarismo, porque nadie cree que pueda ganar y, sobre todo, gobernar. Los «últimos de Ferraz» le mostraron su afecto e intentó animarlos, anunciando que al día siguiente partía en Falcon, como es normal, a la cumbre de la OTAN. En cambio, el ganador del debate decisivo llegaba a la calle Génova y el sentimiento de la victoria se percibía fácilmente. A pesar de los esfuerzos de la izquierda mediática, Sánchez fue el mejor aliado de Feijóo.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)