El puntazo

La sensatez de un alcalde

Sánchez no es un demócrata al uso y por eso el PP no puede pecar de ingenuo ni sumar sus votos a alguien «con vocación totalitaria»

José Luis Martínez-Almeida goza de un grado de aceptación y popularidad creciente entre sus convecinos. El Ayuntamiento de Madrid es un desafío superior a un Ministerio y las encuestas avalan su gestión. Desde su tribuna consistorial, es una voz indiscutida e indiscutible en el PP. En una entrevista con LA RAZÓN, defiende que el partido debe centrarse en robustecer su alternativa al sanchismo que es lo que los españoles demandan y precisan. Ni el PSOE ni mucho menos Vox, los ciudadanos. Es su mensaje sin que relativice la extraordinaria dificultad de enfrentarse a un adversario como Sánchez que «no conoce límites, que no tiene reglas y que no respeta principio alguno. Que utiliza y abusa de las instituciones a su favor y que no tiene problema en degradar la democracia». Tiene razón Almeida en su lúcido análisis. Sánchez no es un demócrata al uso y por eso el PP no puede pecar de ingenuo ni sumar sus votos a alguien «con vocación totalitaria».