Sanidad

Darias empeora a Illa: el Ministerio de Sanidad es un desastre

El grave problema de la canaria es que no hizo la limpia necesaria cuando llegó al cargo y ahora está pagando las consecuencias

La ministra de Sanidad, Carolina Darias
La ministra de Sanidad, Carolina DariasEUROPA PRESS/J. Hellín. POOLEuropa Press

El Ministerio de Sanidad es un auténtico desastre en el que la directora de la Agencia del Medicamento, María Jesús Lamas, parece la única capaz de dar la talla. Ya sucedía bajo el mandato del nefasto Salvador Illa y se repite ahora, con Carolina Darias, quien lejos de mejorar la pésima herencia del catalán se la va a dejar aún peor a quien llegue detrás de ella. El grave problema de la canaria es que no hizo la limpia necesaria cuando llegó al cargo y ahora está pagando las consecuencias.

La Dirección General de Salud Pública que comanda la desaparecida Pilar Aparicio y en la que se encuadra Fernando Simón, no da una a derechas, ni a izquierdas ni al centro. Su actuación durante la pandemia debería haber sido motivo de destituciones fulminantes, pero ahora riza ya el rizo de la incompetencia. El documento de restricciones a la hostelería y al ocio nocturno no tenía por dónde cogerse ni epidemiológica ni jurídicamente, y Darias se ha visto en el trance de tener que retirarlo, incurriendo en el más absoluto de los ridículos.

También lo ha hecho Sanidad con los MIR. Tras imponerles una adjudicación telemática de plazas carente de garantías, el Ministerio ha tenido que rectificar. El director de Recursos Humanos, Vicenç Martínez, es un médico reputado de muy buenas formas, pero como alto cargo ha metido la pata hasta el fondo y también debería salir.

La ministra tiene otro gran agujero en Farmacia. Allá por donde va, Patricia Lacruz provoca fuegos: parte de su equipo la ha dejado y la industria farmacéutica está en armas. La última tontería que podría ser la puntilla para Darias es la idea de instaurar un copago para los fármacos de marca. Lo que le faltaba a la canaria.