Alimentación
Esta es la diferencia entre los aceites de oliva y cómo nos afecta a nuestro cuerpo
El influencer gastronómico Alfredo López cuenta a través de sus redes sociales algunas propiedades de los distintos aceites de oliva
Según el Ministerio de Agricultura, España es el país líder mundial en superficie, producción y comercio exterior en aceite de oliva, gracias a la tradición olivera de nuestro país y a una industria tecnológicamente avanzada y capaz de obtener aceites de gran calidad. Con un 65% de su comercialización total, España es el primer exportador mundial de aceite de oliva. Es un elemento esencial en las dietas mediterráneas, conocido por sus beneficios para la salud, incluyendo la reducción del colesterol LDL (el malo) y la protección contra enfermedades cardiovasculares.
¿Cuál es la diferencia entre aceites de oliva?
El aceite de oliva normal, se hace con aceites que no valen. Simplemente se refinan y se les echa un poquito de aceite de oliva virgen. Cuesta más o menos unos 7 euros el litro y es mucho más sano que el aceite de girasol. Otro, es el aceite de oliva virgen, lo considera "zumo de aceituna", pues no tiene la máxima calidad porque tiene el índice de peróxido en 0,2. Por último, existe el aceite de oliva virgen extra, es el más sano, pues es el que tiene mayor índice de antioxidantes, es el que baja la tensión y reduce el colesterol. Contiene óleocantal, que es el anticancerígeno.
Este último es el que más nos gusta y el más sano de todos, en los supermercados ronda los 10 euros el litro. Están mucho más baratos en los almazaras. En conclusión, según Alfredo López, los muy buenos son los virgen y los virgen extra. Por último recuera que un gramo tiene 9 calorías.
Por otro lado, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha vuelto a hacer un exhaustivo análisis sobre los aceites de oliva que se encuentran en los supermercados españoles, analizando su calidad y pureza. En este análisis se hizo especial hincapié en el aceite de oliva virgen extra (AOVE), que es el más puro y se obtiene exclusivamente a través de procesos mecánicos sin refinar. Este tipo de aceite es altamente valorado por su sabor y propiedades nutricionales. La evaluación se realizó en laboratorios acreditados con catadores especializados.
En este estudio se llegó a la conclusión de que el mejor aceite de oliva virgen extra es el Oleostepa, obteniendo 89 puntos sobre 100. Este aceite, con denominación de origen Estepa, ha sorprendido por su calidad superior al resto. Otros aceites que han sobresalido son el marca Abril, la marca blanca de El Corte Inglés y el Bio Ecológico de Carrefour.
Factores para identificar el mejor aceite de oliva
A la hora de comprar aceite, estos son algunos de los puntos más importantes que tienes que saber para escoger el de mayor calidad.
- Variedad de la aceituna: hay variedades que influyen en el sabor y en sus propiedades, algunas como Arbequina, Picual y Hojiblanca.
- Procedencia geográfica: Italia, Grecia y por supuesto España, son conocidos por exportar aceites de gran calidad.
- Método de extracción: en este sentido la extracción en frío es ideal ya que preserva los compuestos volátiles que aportan aroma y sabor.
- Acidez: un buen aceite de oliva virgen extra no debe superar los 1,8 grados de acidez, mientras que el aceite virgen llega a tener 2 gramos.
- Certificaciones: certificaciones como la Denominación de Origen Protegida aseguran que el aceite cumple con altos estándares de calidad.
¿Qué es más sano, el aceite de oliva o el de girasol?
En España, tanto el aceite de oliva como el aceite de girasol son ampliamente utilizados, aunque el aceite de girasol es más común en la cocina cotidiana, especialmente para freír. Esto se debe a su costo más bajo en comparación con el aceite de oliva, considerado un "oro líquido" debido a su elevado precio. Existen varias diferencias entre estos aceites que influyen en sus beneficios para la salud.
Ambos aceites tienen efectos positivos, sin que uno sea inherentemente mejor que el otro. El aceite de oliva es rico en grasas monoinsaturadas, con aproximadamente un 73% de ácido oleico. También proporciona vitamina E y polifenoles, que son antioxidantes beneficiosos para el organismo. Además, contiene menos grasas poliinsaturadas. Estas características lo convierten en un alimento valioso para prevenir enfermedades cardiovasculares y para mantener niveles saludables de glucosa en sangre.
El aceite de girasol, por otro lado, tiene un contenido significativamente mayor de ácido linoleico, con aproximadamente un 65% de grasas poliinsaturadas. Estas grasas incluyen ácidos grasos esenciales como el Omega-3 y el Omega-6. Además, el aceite de girasol también es una buena fuente de vitamina E. Estos componentes pueden contribuir a reducir los niveles de colesterol LDL y los triglicéridos en la sangre.
La reconocida nutricionista Boticaria García hace unos meses se pronunció en sus redes sociales sobre el aceite de oliva: "Al calentar ambos aceites a altas temperaturas se oxidan sus moléculas, produciendo peróxidos, aldehídos y cetonas", asegura en un principio la experta en nutrición. Estos aceites pueden formar agentes oxidativos muy potentes y "tóxicos para las células" cuando se calientan a altas temperaturas, especialmente durante la fritura, lo que representa una de las principales desventajas nutricionales de su uso. Por esta razón, es importante consumirlos con moderación.
"Las grasas monoinsaturadas del aceite de oliva son más estables y resisten mejor las altas temperaturas", mientras que "las grasas poliinsaturadas del aceite de girasol se oxidan más fácilmente", explica la nutricionista. Por lo que el aceite de oliva es más saludable.
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