Oftalmología

Si al despertar notas esto en tus ojos, es crucial consultar a un oftalmólogo. Podría revelar una condición subyacente

Este síntoma suele venir acompañado de otros, como picazón en los ojos, lagrimeo persistente, enrojecimiento ocular y sensibilidad a la luz

Un aumento constante y significativo en la cantidad de legañas podría indicar un problema subyacente
Un aumento constante y significativo en la cantidad de legañas podría indicar un problema subyacentePixabay

Si notas una acumulación inusual de legañas en tus ojos al despertar y mirarte al espejo, es posible que sea un problema que merezca tu atención. Es común tener legañas al despertar, sin embargo, un aumento repentino o persistente, especialmente si son de color blanco o amarillo, es crucial consultar a un oftalmólogo. Podría ser una señal de alerta que no debes ignorar.

Cuándo preocuparse por las legañas

Despertar con una sustancia extraña en los bordes de los ojos es incómodo. Por instinto, eliminamos las legañas con los dedos. Estas son acumulaciones de líquido lacrimal seco y células epiteliales muertas. Es crucial entender que las lágrimas, que luego se convierten en legañas, cumplen una función vital: mantienen los ojos lubricados y previenen la sequedad ocular que puede causar molestias.

Surgen entonces dos preguntas: ¿por qué algunas personas tienen más legañas que otras? Y más importante, ¿qué significa un aumento significativo en su cantidad? ¿Debemos preocuparnos?

Soy oftalmóloga y esta es la forma correcta de rascarnos los ojos sin dañar la córnea
Soy oftalmóloga y esta es la forma correcta de rascarnos los ojos sin dañar la córneaLRLR

La respuesta a la primera pregunta no es definitiva. Aunque no se sabe con certeza por qué algunas personas despiertan con más legañas, si la cantidad es habitual para cada individuo —es decir, si no hay un aumento repentino— no hay razón para alarmarse. Un evento aislado no es motivo de preocupación. Probablemente se deba a que una partícula minúscula entró al ojo durante la noche, causando lagrimeo.

Sin embargo, un aumento constante y significativo en la cantidad de legañas podría indicar un problema subyacente. Otro signo preocupante es cuando las legañas no se limitan al lacrimal (la zona del ojo más cercana a la nariz), sino que se extienden por los párpados. Si esta condición persiste por varios días, es crucial consultar a un oftalmólogo, especialmente si las legañas son blancas o amarillas. Estos síntomas suelen indicar blefaritis, una inflamación del párpado causada por una infección menor en los folículos de las pestañas o una anomalía similar.

También pueden ser señales de conjuntivitis viral o bacteriana. La secreción de la conjuntivitis bacteriana es más densa y amarillenta o verdosa, mientras que la viral es más líquida y blanquecina. En casos de conjuntivitis, la Sociedad Española de Oftalmología advierte que las legañas suelen acompañarse de picazón ocular, lagrimeo constante, enrojecimiento y sensibilidad a la luz.

Las legañas no son otra cosa que lágrimas secas
Las legañas no son otra cosa que lágrimas secas Sofie Zbořilová Pixabay

Con conjuntivitis, es esencial limpiar las legañas cuidadosamente para evitar propagar la infección, ya que es muy contagiosa. Un remedio casero recomendado es la manzanilla, que puede ayudar a reducir la inflamación, aliviar el malestar y combatir la infección. El método más adecuado es empapar una gasa estéril con manzanilla tibia y aplicarla brevemente sobre el lacrimal. Esto ablanda la legaña, facilitando su eliminación suave sin dañar el ojo. Se recomienda mantener la compresa en la zona afectada un par de minutos para maximizar su efecto terapéutico.

Si las legañas persisten después de varios días, es fundamental consultar a un oftalmólogo. El especialista examinará el ojo para determinar si existe alguna condición subyacente que requiera tratamiento. En caso de diagnosticarse una infección ocular, podrían recetarse antibióticos tópicos.