Investigación

Este es el ingrediente de los perfumes que ayuda a detener hemorragias masivas

Una investigación descubre que un tipo de alcohol -o éster- puede coagular la sangre de heridas producidas, por ejemplo, por un traumatismo grave o por un disparo

Accidente de moto en Gran Vía con Alcalá. Motorista de 35 años muy grave tras sufrir una caída.
Accidente de moto en Gran Vía con Alcalá. Motorista de 35 años muy grave tras sufrir una caída.Emergencias MadridEmergencias Madrid

En países donde la tenencia y el uso de armas de fuego está permitido para el ciudadano de a pie, como Estados Unidos, más de un centenar de personas (111, en concreto) mueren cada día por la violencia provocada por éstas. Las probabilidades de sobrevivir a una pérdida masiva de sangre por una lesión traumática, como la ocasionada por una herida de bala, son de alrededor del 50%. Pero no solo las heridas de bala causan hemorragias masivas, sino también los traumatismos graves derivados de accidentes de tráficos o las heridas causadas por armas blancas.

Para sobrevivir, el paciente necesita que ocurran rápidamente dos cosas: una gran transfusión de sangre y la coagulación en la herida para detener la hemorragia.

El problema es que una de estas soluciones es excluyente, es decir, que optar por una transfusión para tratar de salvar la vida de la víctima merma la capacidad de coagulación de la sangre, un trastorno conocido como coagulopatía.

Ahora, una nueva investigación, realizada por científicos de la Universidad de Tulane (Estados Unidos), ha descubierto que un ingrediente común de los perfumes puede solucionar este problema ya que, al aplicarlo, se puede contener la coagulopatía. Se trata del dimetilmalonato (o malonato de dietilo-DEM), una sustancia que está presente naturalmente en las uvas y fresas, como un líquido incoloro con un olor a manzana y, además de como ingrediente en los perfumes, también es utilizado para sintetizar otros compuestos tales como los medicamentos con efecto hipnótico (barbitúricos), los saborizantes artificiales, la vitamina B1 y la vitamina B6.

"La coagulopatía traumática contribuye en gran medida a la mortalidad, pero ningún tratamiento ha demostrado ser plenamente eficaz -afirma el doctor Olan Jackson-Weaver, profesor adjunto de cirugía en la Facultad de Medicina de la Universidad de Tulane y autor correspondiente del estudio, que ha sido publicado en la revista Science Advances. "Obteníamos un 60% de mortalidad con nuestro modelo animal. Con el malonato de dimetilo, conseguimos un 0% de mortalidad, y la coagulopatía desapareció por completo", añade, según informa Europa Press.

La esperanza de un fármaco que marque la diferencia

Aún asi, Jackson-Weaver señala que es necesario seguir investigando para determinar si el DEM es seguro para el ser humano o si puede desarrollarse un fármaco equivalente dirigido al metabolismo celular. "Hemos establecido la vía que causa la coagulopatía así que, si podemos atacarla terapéuticamente con un fármaco o una inyección prehospitalaria, es de esperar que podamos salvar algunas vidas", destaca. "En los últimos 20 años se ha intentado encontrar la forma de reducir la tasa de mortalidad por hemorragia masiva, pero nada ha funcionado. Tenemos la esperanza de que la comprensión de estos acontecimientos a nivel celular pueda ayudar a desarrollar algo que realmente marque una gran diferencia".