Marta Villanueva: «La historia clínica común logra una Sanidad más ágil, eficiente y útil»

Entusiasta de su labor y ferviente defensora de la colaboración público-privada, Marta Villanueva trabaja de forma incansable para lograr una mejor Sanidad para el paciente. Lo hace desde la dirección general de la Fundación IDIS, entidad sin ánimo de lucro que tiene como objetivo poner en valor la aportación de la privada al Sistema Nacional de Salud.

La Fundación IDIS acaba de arrancar su proyecto de interoperabilidad de la historia clínica en la Sanidad privada. ¿Qué implica este primer paso?

Situar al paciente como protagonista del sistema y corresponsable de su propia salud, ya que podrá acceder digitalmente y compartir sus informes o pruebas con el profesional que desee de los centros integrados en este proyecto, por lo que también implica un proceso de transformación cultural. Pero se trata del comienzo de una carrera de fondo.

¿Cuál es la meta final?

La integración en materia digital de la biografía de salud de los pacientes para el uso primario de todos los datos con fines asistenciales y para el empleo secundario con objetivos de investigación y formación. Es algo en lo que, sin duda, todas las partes ganan, ya que se abre el camino a la continuidad asistencial.

De esto ya se está hablando en Europa... ¿España se pone a la cabeza de este cambio?

La UE ya ha puesto en marcha el espacio europeo de datos sanitarios y eso nos va a afectar de manera inminente y obligatoria a todos los estados miembros más pronto que tarde. Por ahora es de ámbito voluntario y existen varios países que ya se están conectando. El objetivo que se persigue es que se compartan datos sanitarios europeos y transfronterizos, lo que nos permitirá estar dentro de un marco eficiente, fiable y coherente en el que se use la información sanitaria de los europeos de una manera global y a disposición de todos los profesionales. Con el paso que da la Fundación IDIS, nuestro país parte de una muy buena posición para cuando llegue ese momento.

¿Qué plazos tienen previstos?

Esto es una iniciativa de mucha envergadura. Nuestra plataforma ya está operativa, es segura, robusta y funcional, sin vulnerabilidades. Ahora cada entidad adherida decidirá el momento en el que la abre al público según su estrategia o sus propios tiempos. Será algo paulatino, pero los primeros lo harán en pocos días.

¿Por qué era tan necesario poner en marcha algo así?

Porque la forma de trabajo actual está cargada de barreras y no resulta buena para nadie. Por un lado, perjudica al paciente por la dificultad de acceso a su historia clínica, que es su derecho y su propiedad. Por otro, afecta al profesional, ya que no tiene una visión holística de la persona que está tratando y, por último, daña al propio sistema sanitario, porque lo hace muchísimo más ineficiente y menos ágil y fiable.

¿Se trata de un gran hito para nuestra Sanidad?

Sin duda, porque plantea un escenario imprescindible de continuidad asistencial en el que el paciente, es decir, todos nosotros, podemos transitar por el sistema sanitario con libertad, sin barreras, sin interrupciones y sin que afecte a la asistencia. Normalmente los ciudadanos con doble aseguramiento –público y privado– usan el sistema de forma mixta, pero lo deseable es disponer de las herramientas adecuadas que permitan disponer de nuestros datos y ofrecerlos a los profesionales cuando nos atiendan, con independencia del modelo sanitario que estemos empleando en cada momento.

¿Nos hará tener un mejor modelo sanitario a nivel global?

Cualquier sistema de salud que se precie se debe a sus pacientes y a los profesionales. La interoperabilidad será el hilo conductor de una Sanidad más ágil, que evite cargas burocráticas innecesarias; más eficiente, eliminando duplicidades y el impacto de pruebas redundantes; y mejor gobernanza, porque facilita la conexión entre distintos especialistas en un mismo entorno y aumenta la calidad asistencial y la seguridad de las intervenciones realizadas.

¿Qué lecciones se han aprendido de la pandemia?

Es muy sano no olvidar las malas experiencias. La covid puso de manifiesto la imprescindible necesidad de colaboración y cooperación entre todos los agentes del sector. A pesar de ello sigue sobrando carga demagógica e ideológica, lo que entorpece el empleo de los recursos disponibles para tener una Sanidad accesible.

A pocos días de las elecciones... ¿Qué pediría a los futuros responsables políticos?

Que trabajen por la normalización de la existencia de la Sanidad privada dentro del propio sistema sanitario. Hay que avanzar en la refundación y reconstrucción del modelo actual para que consiga dar respuesta a las necesidades reales del paciente, caracterizado por el envejecimiento de la población, las multipatologías o la cronicidad. En paralelo, resulta imprescindible la despolitización de la política sanitaria, apostando por la cooperación entre los distintos agentes privados y públicos en beneficio del paciente, del profesional y del sistema. Hacen falta leyes que permitan la equidad, la sostenibilidad financiera y la accesibilidad a la innovación.