Medicamentos

La segunda revolución de los fármacos para adelgazar: orales y diarios

Las futuras pastillas de dos laboratorios aseguran ser tan eficaces para perder peso como los tratamientos inyectables. Pero, ¿qué diferencias de peso hay entre unos y otros?

Estos tratamientos dan la sensación de saciedad
Estos tratamientos dan la sensación de saciedadDREAMSTIMELA RAZÓN

A medida que se ha popularizado la demanda de las inyecciones para adelgazar, también crecen las alternativas a los tratamientos actuales tipo Ozempic, Wegovy (semaglutida) o Mounjaro (tirzepatida). La más avanzada es Orforglipron, una simple pastilla de ingesta diaria, el GLP-1 oral de Lilly, que podría llegar a desbancar a las inyecciones semanales.

Varias son sus ventajas, tal y como han demostrado dos estudios publicados recientemente. Así, además de la comodidad que supone para muchos no tener que pincharse, el ensayo clínico en fase 3 «Attain-1», publicado en «The New England Journal of Medicine», y que evalúa la seguridad y eficacia de Orforglipron en adultos con obesidad (o sobrepeso con un problema médico relacionado con el peso) y sin diabetes, el GLP-1 oral de Lilly demostró una reducción media de peso del 11,2%. En concreto, más de la mitad de los 3.127 pacientes a los que se siguió durante 72 semanas perdió al menos un 10% de su peso y aproximadamente el 18% llegó a reducirlo en más del 20%.

Los participantes fueron asignados aleatoriamente a diferentes dosis de orforglipron (6 mg, 12 mg o 36 mg) o a placebo, siempre en forma de una cápsula diaria.

Los resultados muestran que entre los pacientes que recibieron la dosis más alta de Orforglipron (36 mg), el 54,6% tuvo una reducción del 10% o más, el 36% tuvo una reducción del 15% o más y el 18,4% tuvo una reducción del 20% o más de su peso, en comparación con el 12,9 %, el 5,9 % y el 2,8 % de los pacientes, respectivamente, en el grupo placebo.

Pero no solo logra mejorías respecto al placebo, tal y como demuestra el estudio «Achieve-3», un ensayo clínico en fase 3 que compara Orforglipron con la semaglutida oral (Rybelsus es el formato oral ya existente del mismo principio activo de Ozempic) en pacientes con diabetes tipo 2.

El ensayo de 52 semanas de duración (pendiente de publicar en una revista revisada por pares) comparó Orforglipron con semaglutida oral a través de cuatro brazos de tratamiento activo para evaluar el control glucémico y la pérdida de peso.

Los resultados son concluyentes: «Se logra una reducción de la hemoglobina glicosilada (HbA1c) y una mejoría del control glucémico y también una reducción del peso mayor», afirma el médico e investigador español Fernando Gómez Peralta, coordinador del área de conocimiento de Diabetes en la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).

En concreto, Orforglipron redujo la HbA1c en un promedio de 1,9% (con la dosis de 12 mg) en comparación con 1,1% (7 mg) y 1,4% (14 mg) logrado con la semaglutida oral a las 52 semanas.

Además, el 37,1% de los participantes con la dosis más alta de Orforglipron logró un nivel de HbA1c menor a 5,7% (es decir, normoglucemia) en comparación con el 12,5% de los participantes que recibieron la dosis más alta de semaglutida oral.

En cuanto a la reducción de peso,el GLP-1 oral de Lilly fue más efectivo que el ozempic oral. Los participantes que tomaron Orforglipron perdieron un promedio de 6,6 kg (6,7% de reducción de peso entre los participantes que tomaron 12 mg de este fármaco) y 8,95 kg (9,2%; 36 mg) en comparación con los 3,6 kg (3,7%; 7 mg) y 5 kg (5,3%; 14 mg) que bajaron aquellos que recibieron semaglutida oral, lo que representa una pérdida de peso relativa un 73,6% mayor en la comparación de dosis más alta. Es decir, 3,95 kg menos al año.

Y no solo. Orforglipron también mostró mejoras clínicamente significativas frente al colesterol no-HDL, la presión arterial sistólica y los triglicéridos.

Respecto a la semaglutida inyectable, aunque este estudio en cuestión no hace esta comparación, el portavoz de la SEEN asegura «que las mejorías de control glucémico y de reducción de peso son similares a las conseguidas con la semaglutida inyectable según los datos de otros estudios» en los que se analizaba las ventajas de los inyectables.

Pero los beneficios no acaban ahí. El único tratamiento oral autorizado a día de hoy, Rybelsus, es una proteína, una molécula de gran tamaño que, para que no sea desintegrada en el estómago, requiere una cobertura que limita su biodisponibilidad por lo que menos del 10% de la semaglutida que se toma por vía oral llega a la sangre y sea eficaz. De ahí que Rybelsus tenga que tomarse 30 minutos antes del desayuno, lo que puede limitar la adherencia al tratamiento, ya que todos andamos con prisa por la mañana.

Por eso en su día cuando hubo el desabastecimiento de Ozempic, muchos pacientes prefiriesen volver a la inyección semanal cuando este problema se solucionó.

Pero el futuro fármaco de Lilly podría aumentar la adherencia en el abordaje terapéutico de la enfermedad metabólica, ya que este comprimido de administración oral «puede tomarse a cualquier hora del día, antes o después de las comidas, porque no es una proteína, sino que son moléculas pequeñas de fabricación más sostenible y accesible tanto en términos de precios como de fácil ingesta. Y su conservación es también superior», destaca el doctor.

Evaluación

En cuanto a la tolerancia al futuro fármaco, el portavoz de la SEEN explica «esta fue muy buena según los ensayos, igual que el resto de su clase. Los efectos adversos reportados fueron ligeros o moderados (náuseas y vómitos los más frecuentes) y en ningún caso obligaron a interrumpir los tratamientos. Además, no tuvieron lugar eventos graves hepáticos», que es lo que llevó a la suspensión de otro fármaco oral para adelgazar de otro laboratorio, danuglipron.

Ante estos resultados Lilly está trabajando para realizar las solicitudes regulatorias mundiales para el tratamiento de la obesidad, que se espera se produzca el próximo año. El envío de los datos para el tratamiento de la diabetes tipo 2 está previsto para 2026. De modo que «esperemos que podamos tenerlo disponible en España a finales de 2026 o principios de 2027. Pero es una esperanza», incide el doctor Gómez Peralta.

Y tiene la ventaja de que «al tratarse de una molécula pequeña podría producirse en nuestro país», añade.

También está pisando el acelerador el laboratorio Novo Nordisk, que ha comunicado unos resultados favorables para el Wegovy en formato de pastilla oral diaria. Su píldora para adelgazar ha conseguido, según lo publicado, una pérdida de peso casi tan alta como su versión en inyección semanal Wegovy en el último ensayo para pacientes obesos o con sobrepeso sin diabetes.

En cuanto a los tiempos, esta pastilla está siendo evaluada por la autoridad sanitaria estadounidense, que debe emitir su decisión a finales de año. Pero Novo Nordisk ya se está preparando para su comercialización en 2026.

Ahora bien ya sea un tratamiento u otro es importante saber que los medicamentos GLP-1 como la semaglutida (ingrediente activo en Ozempic y Wegovy) es más peligroso para la salud que la cirugía bariátrica, pese a lo que se creía hasta ahora.

Así, según una investigación publicada este mes en «Nature Medicine» aunque la cirugía bariátrica es un procedimiento más invasivo, lo cierto es que someterse a esta intervención reduce más los riesgos de muerte, enfermedades cardíacas, insuficiencia renal y daño ocular frente a tomar fármacos antiobesidad.

Y no solo. Este verano un estudio de la Universidad de Nueva York concluía que quienes pasan por la cirugía bariátrica tienden a perder mucho más peso que quienes toman medicamentos GLP-1.