Salud

Las 10 principales razones que pueden llevarte a perder más pelo de la cuenta: el efluvio telógeno

El síntoma principal del efluvio telógeno es el aumento considerable de caída capilar, que origina una menor densidad

El efluvio telógeno es una de las causas más frecuentes de alopecia
El efluvio telógeno es una de las causas más frecuentes de alopeciaDreamstimeDreamstime

A nadie le gusta que se le caiga el pelo más de la cuenta. La buena noticia es que nuestro cabello está en constante renovación, por lo que debe desprenderse en algún momento. De hecho, al día perdemos cerca de un centenar. Ahora bien, ¿cuándo detectar que hay un problema? Los expertos coinciden en que cuando hay un aumento considerable de la caída capilar, y a su vez, se notifica una menor densidad capilar.

“Se le suele llamar a este cuadro ‘efluvio telógeno’, un fenómeno que en la actualidad está infradiagnosticado, ya que en la mayor parte de los casos no se llega a consultar”, afirma la Dra. Rita Rodrigues, Jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Quirónsalud Valle del Henares (Madrid).

Concretamente, cita que el síntoma principal del efluvio telógeno es el aumento considerable de caída capilar, que origina una menor densidad capilar, que normalmente no es objetivable a simple vista, pero que se puede acentuar más en las recesiones temporales.

Cuenta esta experta que, en un cuero cabelludo normal, aproximadamente, el 86 % de los folículos se encuentran en la fase de crecimiento (anagen), el 1 % en catágeno (fase de reposo), y el restante 13 % en fase telógeno o de caída. “Esta proporción normal cambia a aproximadamente un 70 % de folículos en anagen, y a un 30 % en telógeno, con el consecuente desprendimiento capilar, que puede llegar a los 300 cabellos diarios”, remarca.

No obstante, este cambio en el ciclo folicular suele tener un inicio agudo y puede estar motivada por diferentes causas, tal y como enumera la Dra. Rita Rodrigues, a continuación:

1- Idiopática: Hasta en el 33 % de los casos no se llega a identificar la causa que desencadena la caída.

2- Cambios estacionales.

3- Nutricional: deficiencia de hierro, de zinc, y de biotina, síndromes de malabsorción, dietas no equilibradas e hipocalóricas, pérdida brusca de peso, entre otras.

4- Causas endocrinas: alteraciones de las hormonas tiroideas, postparto, abortos, suspensión de anticonceptivos vía oral, etc.

5- Enfermedades sistémicas: procesos tumorales, enfermedades febriles, cirugías mayores, traumatismos importantes, conectivopatias.

6- Estrés psicológico: cuadros de ansiedad y estados depresivos.

7- Fármacos: anticoagulantes y antiagregantes, antidepresivos, anticonceptivos orales, entre otros.

8- Intoxicación por metales pesados.

9- Enfermedades inflamatorias del cuero cabelludo: dermatitis seborreica, psoriasis, o eccema de contacto.

10- Vacunas.

Una pérdida transitoria de la densidad capilar

“El efluvio telógeno es una de las causas más frecuentes de alopecia, y consiste en la caída difusa del cabello por el cese prematuro de la fase de anagen (que se corresponde con la fase de crecimiento del pelo), y consecuente paso a la fase de telógeno (fase de caída) en un número de folículos mayor de lo normal; lo que origina una pérdida transitoria de densidad capilar”, subraya el dermatólogo, quien recuerda que el intervalo entre el factor que desencadena la caída y el inicio de la caída varía entre 1 y 3 meses.

La intensidad de la caída de cabello va a depender sobre todo de la duración, prosigue la especialista de Quirónsalud Valle del Henares, y de la intensidad del factor desencadenante, además de una predisposición o susceptibilidad individual.

El diagnóstico

En cuanto al diagnóstico la Dra. Rita Rodrigues, considera fundamental el realizar una anamnesis exhaustiva para poder identificar los factores desencadenantes de la alopecia, que en caso de estar presente se deben tratar para que el crecimiento capilar se vuelva a restablecer. “En casos seleccionados se deben solicitar estudios de laboratorio para identificar alteraciones que justifiquen la alopecia (déficit de hierro y alteraciones de las hormonas tiroideas, entre otras)”, añade.

La Dra. Rita Rodrigues, Jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Quirónsalud Valle del Henares (Madrid).
La Dra. Rita Rodrigues, Jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Quirónsalud Valle del Henares (Madrid).Quirónsalud

Por otro lado, señala que cuando se realiza una exploración con tricoscopia normalmente no se van a observar hallazgos típicos de otras alopecias y el diagnóstico del efluvio telógeno se realiza por exclusión: “Si la paciente consulta en una fase en la que el efluvio empieza a recuperarse, se podrán observar pelos cortos en fase de crecimiento precoz en la tricoscopia. En la fase aguda, el signo de la tracción normalmente es positivo”.

Un fenómeno autorresolutivo

Por otro lado, esta dermatóloga destaca que el efluvio telógeno es “autoresolutivo” y en gran parte de las ocasiones en cuestión de semanas se empieza a recuperar la densidad capilar de forma completa, aunque en un periodo variable, habitualmente en seis meses. “En edades más avanzadas por el envejecimiento folicular, y/o en caso de coexistir con una alopecia androgenética, la densidad capilar puede no llegar a recuperarse completamente”, advierte, de ahí que en ocasiones sea necesaria la puesta en marcha de tratamientos.

La mayoría de los nutricosméticos utilizados no son necesarios a no ser que por las circunstancias personales de cada paciente puedan aportar un beneficio. Su indicación se valorará de forma individualizada”, aclara la doctora Rodrigues.

Por otro lado, menciona que en casos seleccionados se puede utilizar Minoxidil vía tópica o vía oral para acelerar la recuperación del efluvio. El oral será de especial utilidad en caso de efluvios crónicos. A nivel tópico se utiliza normalmente concentraciones que oscilan entre el 2 y el 5 % en solución o en espuma. “Otras alternativas terapéuticas incluyen el plasma rico en plaquetas, el láser de baja potencia o el microneedling, en casos seleccionados de curso más cronificado”, zanja.