Tercera ola

Europa se enfrenta a Ómicron y España no hace nada

El resto de naciones del Viejo Continente van imponiendo restricciones para frenar su expansión y evitar una catástrofe durante las próximas navidades

La «parálisis» del Ministerio de Sanidad ante el incremento actual de los contagios y de la hospitalización, con España en riesgo alto por incidencia, contrasta con las medidas que están tomando los países de nuestro entorno para intentar contener la nueva ola y a la variante Ómicron, que sigue bajo estudio y cuyo desarrollo se verá en las próximas semanas. En este escenario, la Organización Mundial de la Salud (OMS) instó el jueves a los países del mundo a actuar con rapidez. «Si esperan a que sus hospitales empiecen a llenarse será demasiado tarde. No esperen. Actúen ahora», declaró el director general de la OMS, Tedros Adhanom. Por el momento un total de 57 países ha comunicado la presencia de la nueva variante, y la OMS ha advertido que seguirá expandiéndose.

En este contexto son ya numerosos los estados que han anunciado nuevas restricciones para controlar la epidemia antes de las inminentes fiestas de Navidad. Estos son algunos de los más destacados:

Reino Unido

Con más de 600 casos de Ómicron detectados, aunque son «muchos más», según el primer ministro británico, Boris Johnson, el mandatario anunció esta semana un endurecimiento de las restricciones impuestas por la pandemia, como el regreso al teletrabajo o la vuelta al uso de la mascarilla en la mayoría de los espacios públicos (como teatros o cines). También se impuso la obligatoriedad del certificado de vacunación para entrar en discotecas o espacios públicos concurridos.

Johnson señaló que su Ejecutivo tomó estas medidas «tan pronto como se ha descubierto la variante Ómicron», de la que reconoce que aún no se conocen todos los detalles «pero parece claro que se expande rápidamente».

Alemania

Uno de los países europeos más castigados por esta nueva ola ha tomado más limitaciones para intentar frenar los contagios. Así, los clubes y discotecas deberán cerrar a partir de una incidencia de 350 casos por 100.000 habitantes en siete días (en la última semana ha sido de 422). Además, los no vacunados no podrán acceder a determinados espacios públicos, incluidas tiendas (a excepción de las de productos de primera necesidad). También se limitan los encuentros privados de no vacunados al ámbito familiar y otras dos personas de otra burbuja de convivencia, sin contar a los menores de 14 años. La mascarilla vuelve a ser obligatoria en los colegios. El debate sobre la inmunización obligatoria está sobre la mesa, y podría aprobarse para el mes de febrero.

Francia

Es otro de los países más castigados por esta nueva ola, que ha provocado más de 50.000 casos diarios de covid-19. Pese a que el primer ministro francés, Jean Castex, ha insistido en que su Gobierno está evitando recurrir a medidas «desproporcionadas» para contenerla, sí que ha instaurado una nueva batería de restricciones. Las más destacadas son el cierre de las discotecas desde el 10 de diciembre (que estará vigente durante cuatro semanas, hasta principios de enero), el uso de mascarilla en los colegios en primaria y la Administración recomienda el teletrabajo siempre que sea posible. La vacunación de los niños entre 5 y 11 años comenzará a mediados de este mes.

Italia

El país alpino ha centrado sus imposiciones sobre los no vacunados. De este modo, y hasta el próximo 15 de enero, las personas que no han recibido el suero contra el coronavirus en Italia no podrán ir a cine, teatro, conciertos o eventos deportivos importantes, según las nuevas medidas restrictivas que entraron en vigor el lunes para frenar los contagios en Navidad. Este fin de semana entró en vigor en las grandes ciudades el uso obligatorio de la mascarilla en las arterias comerciales más frecuentadas. Los trabajadores del sector público y privado deben presentar desde el pasado mes de octubre al menos un test covid negativo.

Austria

Miles de ciudadanos austriacos han salido a las calles en las últimas semanas en protesta por las medidas adoptadas por el Ejecutivo para contener la incidencia de la covid-19. Desde el pasado 21 de noviembre Austria tiene vigente un nuevo confinamiento (tanto de las personas que han recibido la vacuna como de las que no) para frenar los contagios, con el cierre de restaurantes, hoteles, museos, eventos y el comercio no esencial. La medida ha tenido el efecto deseado, ya que la incidencia ha descendido en las últimas semanas.

Además, el Gobierno de Austria prepara un proyecto de ley que contempla multas de hasta 3.600 euros a las personas que no se vacunen contra el coronavirus, que podría entrar en vigor en febrero y afectaría a todas personas mayores de 14 años.

Dinamarca

En su intento por contener la variante Ómicron, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, anunció una batería de medidas para frenar la transmisión de la variante. Entre ellas destaca el cierre de los locales de ocio nocturno entre las 00:00 y las 5:00 horas, que entra hoy en vigor. En los restaurantes se impone el uso de la mascarilla al moverse por el local. Los niños comenzarán las vacaciones de Navidad el próximo miércoles y hasta el próximo 4 de enero. En lo que respecta a los actos culturales, quedan prohibidos los conciertos de más de 50 asistentes. Las autoridades han pedido a los ciudadanos que cancelen los almuerzos navideños de empresa y eviten los eventos sociales. Frederiksen justifica estas medidas para «evitar» un confinamiento «importante» que «tenga importantes consecuencias humanas y económicas para la sociedad en su conjunto».

Irlanda

En respuesta a la aparición de Ómicron, desde el pasado martes y hasta el 9 de enero las discotecas de Irlanda permanecerán cerradas, y bares y restaurantes deben cerrar sus puertas a las doce de la noche, y solo podrán servir en las mesas aun máximo de seis clientes. Las actividades de entretenimiento, culturales, deportivas y comunitarias que se desarrollen en interiores deberán reducir su aforo al 50% y todos los participantes deberán llevar mascarilla y permanecer sentados. Además, gimnasios, salas de cine y teatro exigen el pasaporte covid.

Suecia

El país escandinavo ha ampliado el certificado de vacunación, que ya era obligatorio en grandes eventos, a la restauración y los gimnasios. El Gobierno sueco ha recomendado evitar las aglomeraciones y que los ciudadanos usen la mascarilla en el transporte público en hora punta, además de que opten por el teletrabajo cuando sea posible.

Países Bajos

Debido al gran aumento de contagios, el pasado 26 de noviembre implantó «medidas estrictas» para reforzar las restriccciones, que incluían el cierre de todo comercio no esencial y restauración a partir de las 17 horas y hasta el día siguiente. Ante la falta de sanitarios para la atención a los pacientes covid, el Ejecutivo informó del retraso de las intervenciones no urgentes en los hospitales, para que los profesionales ayudaran al personal de las UCI.