La investigación

La Guardia Civil estrecha el cerco al autor del atropello de Esther López en Traspinedo

Los investigadores están a la espera de unos informes antes de detener al presunto homicida

La iglesia parroquial de Traspinedo acoge el funeral de Esther López.
La iglesia parroquial de Traspinedo acoge el funeral de Esther López.mir_icalAgencia ICAL

La investigación sobre la muerte de Esther López, la joven de 35 años que desapareció el 12 de enero en Traspinedo (Valladolid) y cuyo cadáver fue encontrado el pasado 5 de febrero, está resultando una de las más largas y complejas para la Guardia Civil. Si bien es cierto que los primeros pasos de esta investigación fueron algo erráticos y, además de comenzar a buscarla muy tarde por un cúmulo de factores, no se peinó la zona donde se encontró su cuerpo y se mantuvo cinco días a una persona detenida, el camino tomado tras el hallazgo del cuerpo estaría siendo lento pero más fructífero. Ahora, según fuentes consultadas por LA RAZÓN, el cerco a los sospechosos se habría estrechado y la detención del presunto responsable de su muerte, estaría más cerca.

Pendientes del GPS y Toxicología

No se practicará, no obstante, hasta no tener bien «atadas» las pruebas contra él y éstas se reforzarán con varios informes que todavía no están sobre la mesa de la magistrada Soledad Ortega, la jueza que instruye la causa desde el Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid. Esto es el informe del GATO de la Guardia Civil –que determinarán qué móviles estuvieron junto al de Esther a la hora de su muerte y qué recorrido hicieron gracias al posicionamiento GPS–, el informe de Tráfico –que determinarán qué modelo de vehículo pudo causar esas lesiones–, el informe de trazas sobre la ropa de la chica para determinar si hay pintura o restos de algún coche además de si el cuerpo estuvo a la intemperie los 24 días de la desaparición y el informe definitivo de la autopsia, con los estudios histopatológicos y toxicológicos.

Sobre esta última, sí ha trascendido parte del informe preliminar, donde se determina que Esther tenía lesiones en la cadera compatibles con un posible atropello. También sabrían ya que por la altura de la chica y el lugar del golpe, podría tratarse de un todoterreno y que esas lesiones serían bastante anteriores a su muerte, es decir, que de haber sido socorrida podría haber salvado la vida.